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AN'UARIO MISIONAL 45 un caso nada más. Este año nos ha tocado un invierno durísimo y ha sido frecuente la baja del termómetro hasta 21 y 22 grados bajo cero; y a pesar de fríos tan intensos me ha sido imposible, por falta material de espacio, colocar en uno de los dormitorios ni tan siquie– ra una estufa. Esto ha sido causa de que haya tenido enfermos a ca– si todos los seminaristas, muchos de los cuales pasaban por primera vez el invierno en camas europeas. Puede figurarse el lector lo duro que se les haría dormir en cama fría a los que estaban acostumbra– dos a dormir en sus kang, tan calientes a veces, que llegan a que· mar las alfombrillas que se extienden sobre su superficie para re- Vista de conjunto del Seminario Prtpatorlo de Slfengchen. 1936. partir y conservar mejor el calor. El frío intenso les obligó una no– che a introducir en el dormitorio un brasero. La aventura a !JOCO más la pagaron con sus vidas; pues, a las pocas horas, varios se ha· liaban intoxicados. Para cuando yo acudí a sus gritos, dos semina· ristas yacían en el suelo y los demás se quejaban de fortísimos do· lores de cabeza. En vista de tan serios contratiempos, el Rvmo. P. Prefecto de– terminó edificar un ala del edificio definitivo del Seminario para el curso próximo. Lo podrá realizar? Será del todo imposible, si las personas piadosas no nos ayudan con sus oraciones y limosnas y , en
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