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· 1 -213 - Tus ojos son el dia,-tu sop lo b existencia; Tu alfombra el firmamento;-la eternidad tu ser. Palomas de los valles,- prestadmc vuestro arrullo; Prestadme, claras fuentes, - vuestro gen til rumor; Prestadme, amenos bosques,-vuestro feliz murmullo, Y cantaré á par vuestro - las glori as del Señor. (Zorrllla.) Ds quince y diez y seis silabas.-Aunque se han hecho ensayos de versos de más de ca– torce silabas, puede decirse que los de quince y diez y seis son por su lndole contrarios á la len– gua castellana y no han tenido aceptación . Sir– van de modelo los siguientes de D.ª Gertrudis de Avellaneda. De quince: La flor delicada, que apenas ex iste una aurora, Tal vez largo tiempo al ambient e le deja su olor .... Mas ¡ay! que del alma las Aores, que un dia atesora, Muriendo marchitas no dejan perfume en redor . De diez y seis: ¡Guarde, guard e la noche callada sus sombras de duelo, Hasta el triste mom ento del sueño que nunca term ina; Y aunq ue hiera mis ojos, cansados por largo desvdo, Dale ¡oh soll á mi frente, ya mustia, tu llama divinal ' 1

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