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-137- luntades ..En 13ste punto lo mi smo ha de evitar el orador una tirriidez excesi \'U que una inmodes– tia exugerndn; porque lu primern revela descon– fianza en lus propias fuerzas y poca firmeza de convicciones, y In seg und a acusa desvergüenza, petulancia ó soberbia, defectos cens urables que debe cuidado sa mente evitar. Otra cÚalidad muy importante es la entere za de ca rácter para proseguir con decisión en sus propósitos y manife~tar con firmeza sus convic– ciones. Ceder á influencias ext1·1111as 6 al'redrar– se ante los obstáculos es vel'go11zoso é indigno de un buen orado !', cuya elevada misión es de– cil' siempre la ve1·dad y defender la justicia. Finalmente ha de tener una sensibilidad ex– quisita para l>uscar en su pr opio cornzón los afectos que deben animc11· sus palabras y tl'as– mitirl os con Yiveza ::\ los oyentes; la frialdad ó falta de sen timient o es e11la oratoria un defecto capital. Cualidades fisicas,-Las cunlidades físicas que el orador ha d2 posee r se retiernn á la figu– ra, voz, pro1wnciacr'ó12 y accr'ón. Enseiia la experiencia que una figura simp á– tica realza las cualidades del espíritu y predis– pone favorablemente. Es, pues, evidente que si favorece al Ol'adol' una fiso nomía noble, mages– tuosa y expl'esiva, acompaiíada de un cuerpo gentil y gallarda presencia, tendr á ya a ntes de hablar predispuesto en su favor a l audito1·io. Cla– ro es tá que estas cualidades, aunque muy esti– mables, no so 11 absolutamente necesal'ias, y

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