BCCAP000000000000121ELEC

274 MIGUEL-ANXO PENA GONZÁLEZ $ Ho que tan de moda está la defensa de unos personajes, corno es el caso de Las Casas, o la condena de los conquistadores, vgr. Hernán Cortés, su actitud nos puede desconcertar; pero no podemos olvidar el interés y la atención que estos autores tenían a cuidar una perfecta sintonía entre una doctrina teórica, con una praxis. A su favor cuenta con años de entrega y dedicación a la causa india na, en los que administra sacramentos, predica, catequiza, realizando esta tarea en el náhuati, al mismo tiempo que muestra una exquisita sen sibilidad hacia la manera de vivir de los indios, así corno hacia su pro pia cultura. Será desde ese conocimiento desde donde intente ofrecer respuestas en sah’aguarda y defensa de los más pequeños de aquella sociedad. Sus obras, conjuntamente con las de otros misioneros, siguen siendo un ele mento necesario para el conocimiento de la historia y cultura indígenas. Entre ellas sobresale su Historia de los indios de la Nueva España, donde los datos son fidedignos y equilibrados, como fruto de la encomienda que su Orden le había hecho en 1536, para que escribiera el relato de las affli güedades mejicanas y la historia de la conversión. Corno ocurrirá con muchas obras de éste momento, permaneció inédita hasta 1848, en que la publicó fragmentariamente lord Kingsborough, en 1848 y, diez años más tarde, completa García Icazbalceta en la Colección de documentos para la Historia de México. b) Juan de Ztt1;ldrraga () 1548)12 Este franciscano observante, natural de Durango, es una figura poli facética y en los últimos años se ha insistido precisamente en sus diver sas cualidades y la conformación de ellas. Nos encontramos a un hombre amplio de mente, muy próximo a los grandes humanistas de la época, auténtico apóstol y misionero, al mismo tiempo que un perfecto hombre de gobierno. 12. L. GÓNIEz CANEDO, “Juan de Zcimái-raa y Jerónimo de Mendicta. Dos grandes ay tílices de la primitiva cristiandad en América”, en 1. ARAN,\ PÉREz (coord.), Los lascas y Á;Ilé,ica. Ideas, hechos, lio,,ihres, Madrid, Espasa-Calpe, 1990, 283-288; M. LEÓN-PORrILLA, Fray Juan de Zuiiuar,aga e las lenguas iiuclígeiuas de México, en ignacio ARANA PÉREZ (coord.), Los vascos y América. Ideas, hechos,honzbres, Madrid, Espasa-Calpe, 1990, 289-297; F. GIL, Primeras “Doctrinas” del Nuevo Mundo. Estudio histórico-teológico de las obras de fray Ji10,1 de Ztmudnvga (154$), Buenos Aires, Publicaciones de la Facultad de Teología de la Pontificia Universidad Caiólica Argentina “Santa María de los Buenos Aires”, 1993; J. GoNzÁLEz R0DRÍGLEz, “Zumúnaga y el nivel cultural del indíena mexicano”, en Euuskal Flema y el ¡Vuelo Mu,ido. La co,,t,ibució,i de los l’ascos a la toruzación de las Américas. Congreso inter nacional tic izistona tic América, vol. VI, Vitoria-Gasteiz 1994, 521-533; E. M. TORRES TORRES, “De la ciudad cristiana a la ciudad divina: La fundación del Obispado de México, 1528-1543”, en Eféuzerides Mexicanae 19(2001)27-54, 213-242, 317-334.