BCCAP000000000000119ELEC
füARIO DE ESTUDIOS BOLIVIANOS, ARCHIVÍSTICOS Y BIBLIOGRÁFICOS 569 detrás con ahullídos dolorosos, para detenerlo, y al cabo lo obligaron a quedarse las tiernas demostraciones de su pueblo 208 . San Juan Crisóstomo, después que se aumentó obligado por la persecución de sus émulos, fue buscado a los tres días, y entró entre públicas aclamaciones de sus mismos enemigos, que a gritos publicaron de que habL sido desterrado por falsón, y supuestos crímines 209 . Por último, quando Justina, maure del emperador Valentiniano, quiso desterrar de su sede a San Ambrocio, se conmobió el pueblo de Milán, oponiéndose a tan injusto mandato, y consiguió estorbar la salida de su Patria. 57. ¿Y quáles son las finezas que egecutó con migo, mi amado pueblo de la Paz, mi rebaño y mi esposa, quando me vio preso entre soldados, desterrado a pocos días en una Hazienda de campo, casi sin comunicación, sitiado por todas partes, desposeído del govierno de mi Iglecia, y sacrílegamente calumniado por las (f. 14v) bocas bornees de los foragidos tremultuantes? 58. ¡Ah! Qué es presiso imitar al soberano pastor con la mansedumbre y con el alhago para con las obejas más enfermas y más descarriadas. Sí señor. Amo de todo corazón al rebaño que me tiene encomendado el Soberano Maestro, y por defenderlo de los lobos camiseros que lo corrompieron con su mal exemplo, estube a pique de perder la vida por muchas ocaciones, sufriendo y tolerando la innominia insoportable de que el abogado Ortis hubiese lebantado la horca públicamente diciendo que era para colgarme, a la vista de mi propio pueblo que bió y escuchó, a sangre fría este oprobio; el más sacrílego del mundo. 59. En verdad que la Junta, que se llamó representatiba con fecha 29 de septiembre 210 y seguidamente el cavildo cecular en 30 del mismo 211 , me llamaron a mi capital con grande aparato de sumición y respeto. Desde luego creo que no todos los regidores, penetraron esta sacrílega asechansa. El designio fue arrancarme del pueblo leal de Irupana, para asecinarme entre sus fragosos caminos, y apoderarse sin embarazo de todo Yungas, como refugio para la retirada de los insurgentes de la Paz, en qualesquiera malas resultas. 60. No es juicio temerario. Examine V. S. las esquelas y cartas de Lanza, y sus iniquos coligados con fecha delº 5. 7. 13. y 14. de octubre 212 , y descubrirá en ellas toda la malicia de sus planes sanguinarios, en orden a mi exterminio. Ellos estando ya dentro de Yungas, me llamaron con instancia con el título de tratar sobre la pacificación de los ánimos, sólo para sacanne de Irupana del abrigo de sus fieles avitantes, para executar con migo, el mismo suplicio que (f. 15r) con Don Miguel Ignacio Zavala, y en otros quatro europeos más. 208 Baronio tom. 4. Annalium año 380. 209 Sócrates lib. 6 de la Hist. Eclesiast. Cap. 4. 21 ° Corre a f. 15. 211 Corre a f. 19. 212 Esquelas y cartas, de f. 22. 23. 26. 27. 35. 47.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz