BCCAP000000000000115ELEC

Al ser expulsados los jesuitas, se producirán fuertes cambios, que ten- drán su punto de referencia en las pragmáticas reales 10 , aunque el sustrato ideológico seguirá presente. Siles Salinas, considera que «aunque desde 1767 —fecha de la expulsión— hasta la iniciación de la independencia transcurrieron cuarenta años, durante ese largo transcurso no se olvidó a los antiguos misioneros y catedráticos de universidades y colegios» 11 . A los estudios de jurisprudencia se añadirán dos años más, que se debían reali- zar en la Academia Carolina de practicantes juristas , que había sido crea- da por la Audiencia dos años después de la expulsión de la Compañía. Esta institución dependía directamente del Tribunal de la Audiencia, sien- do cada acto académico presidido por un oidor. Ésta, con el tiempo, lle- garía a convertirse en un terreno abonado para que los practicantes pudieran debatir sobre las ideas del momento, entre las que lógicamente estarían aquellas contrarias a los intereses de la monarquía 12 . En ellas, los criollos ocuparían un papel significativo, manteniendo controversias hacia la administración española. No sería muy complicado que, como base en la Academia, se pasara en un segundo momento a reuniones secretas, a las que acudirían aquellos que más coincidirían en una serie de ideas e ideales contrarios a la actitud de la monarquía española 13 . No cabe duda que, también entre las aulas de Teología estas ideas comenzarían a ocupar un papel destacado, máxime si tenemos en cuenta que era normal que los estudiantes completaran también sus estudios con los de Derecho Canónico, de tal manera que les fuera más fácil acceder a la burocracia del virreinato. Un claro ejemplo de este tipo de posturas es el presbítero, José Antonio Medina, nacido en San Miguel de Tucumán en 1773, que mantiene una formación doble, que le permite ocupar la cátedra de Teología en el Convictorio Carolino y, al mismo tiempo, asistir a los deba- tes que los juristas mantenían acerca de la organización social y política, en el cenáculo de abogados. De Medina conocemos sus vinculaciones ideológi- cas y afectivas con Monteagudo, así como sus ideas contrarias al predomi- nio español. Lógicamente, al tratarse de un eclesiástico resultaba más fácil Conflictos en las independencias hispanoamericanas… 117 10 Acerca de los mismos, cf. E. Villalba Pérez, Consecuencias de la expulsión de los jesuitas de América, Madrid 2003; Mª C. Vera de Flach (coord.), Primer Congreso Internacional sobre Historia de las Universidades en América y Europa, t. I-II, Córdoba de Argentina 2003; F. de B. Medina, Las universidades particulares de América regidas por las órdenes religiosas. Algunas observaciones para su estudio, in: Mª C. Vera de Flach (ed.), Reformas universitarias y movimientos estudiantiles en América y Europa, t. I, Córdoba de Argentina 2006, 19-48. 11 J. Siles Salinas, La independencia de Bolivia…, 52. 12 Acerca de este tema, cf. C. Thibaud, L’Académie caroline de Charcas: une école de cadres pour l’indépendance (1774-1809), in: Bulletin de l’Institut Français d’Études Andines 26, 1997, 87-111. 13 A este respecto, Abecia, refiriéndose al «Discurso sobre la mita del Potosí» de Villava, afir- ma: «su manuscrito fue conocido por las autoridades y, siendo el director de un foro de discusión académico, lo conocieron también aquellos doctores de Charcas que iban por el camino del cam- bio». V. Abecia Baldivieso, La Universidad creadora de integración y deferencias … , 43.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz