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tupida leyenda del averroísmo latino. En el otoño de la Edad Media el término averroísta fue un insulto que se utilizó para designar a toda persona poco respetuosa con las normas emanadas de la auto- ridad establecida. La modernidad no hubiera surgido sin estos revo- lucionarios que se caractizaron, entre otras cosas, por ser cardiocéntricos. LA VÍA DE LA EXPERIENCIA Las doctrinas cardiocéntricas estimularon grandemente el estu- dio de todo lo relacionado con el corazón. Esto hizo que se descu- brieran una enorme cantidad de datos de experiencia. El científico antiguo tuvo buen cuidado en distinguir la ratio del experimentum , y consideró siempre la primera como muy superior al segundo. Ya hemos visto a qué condujo la vía de la ratio . Pero no podemos olvi- dar los hallazgos que fue coleccionando por la vía del experimen- tum , sin duda humildes, pero que fueron, como inmediatamente veremos, una de las bases para la constitución de la medicina cien- tífica moderna. La experiencia cardiológica de la medicina antigua se concen- tró en dos áreas bastante bien diferenciadas, la anatomo-fisiológica y la patológico-terapéutica. Hasta el Renacimiento cabe afirmar que ambas áreas caminaron absolutamente desconectadas entre sí, razón por la cual requieren un tratamiento autónomo e independiente. Luego, como final de este apartado, veremos las novedades que se producen en los siglos XVI y XVII por la vía del experimentum , y que van a suponer no sólo un cambio sustancial en nuestro conoci- miento del corazón y del sistema circulatorio, sino también la des- articulación de todo el sistema conceptual establecido por la vía de la ratio . Cuando esto sucede, a mediados del siglo XVII, puede decirse que ha nacido ya la medicina moderna. Los médicos antiguos no distinguieron nunca claramente la ana- tomía de la fisiología. De hecho, tuvieron una concepción de la ana- tomía estrictamente funcional, y ello explica por qué en la sistemática alejandrina de la medicina la anatomía es una de las siete cosas naturales, es decir, un capítulo más de los que componen la fisiología, o ciencia que estudia el cuerpo en estado de salud. Hay LAS RAZONES DEL CORAZÓN 51

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