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los valores, su filosofía de la historia, su doctrina de los modelos o su fenomenología de los sentimientos. Visto en perspectiva evoluti- va, el texto sobre San Francisco representa un punto de inflexión en el que cabe reconocer, formulados por vez primera, elementos carac- terísticos de la filosofía última de Scheler y su interpretación de San Francisco teñida de panteísmo. Niklaus Kuster, OFMCap., Prof. de la Universidad de Lucerna (Suiza), se adentra en el estudio de la historia de Santa Clara de Asís , sobre la que, desde hace diez años, se ha investigado mucho, tanto dentro de la Orden Franciscana como fuera de ella. Importantes his- toriadores han llegado a tres sorprendentes conclusiones: Santa Clara no pertenecía á la Orden de las Clarisas; San Damián tiene poco en común con la Orden de San Damián (Ordo sancti Damiani). Ni San Francisco ni Santa Clara , sino los Papas fundaron la Segunda Orden, mientras que, para Santa Clara , sus Damas Pobres formaban parte de los Hermanos Menores (de la Primera Orden). El presente artículo muestra el camino que Santa Clara escogió: Era muy fiel a la forma de vida de San Damián (1211) que San Francisco, a ruego de las Hermanas, anotó y que Santa Clara , finalmente, tomó como núcleo para la Regla de sus Damas. Al mismo tiempo, Santa Clara se emancipó de la política papal con las Órdenes femeninas que lle- vaban un espíritu diferente. Carlos Bazarra, OFMCap., Prof. del ITER de Caracas, procura interpretar la pobreza franciscana desde una base antropológica. La teología de la liberación ha venido poniendo el acento en los pobres en su sentido económico-social. Hoy, sin renunciar a esta dimensión, se está poniendo de relieve una perspectiva antropológica: el pobre no es sólo carencias, sino que tiene un estilo propio de vida, huma- nìzador y salvífico. No se trataría sólo de combatir las deficiencias, sino de asumir su estilo de vida. Esta concepción de 1a pobreza no es nueva, sino que la encontramos realizada y vivida en San Francisco de Asís. A través de la historia franciscana y de los escritos del Santo, se intenta diseñar la estructura antropológica de la pobre- za: pobreza creatural inherente a la condición de todo ser creado; pobreza histórica, en su dialéctica de ricos y pobres, que debe ser superada; pobreza escatológica que se da en todos los bienaventu- rados y que debemos anticipar en nuestra realidad presente. PRESENTACIÓN 15