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140 MIGUEL ANXO PENA GONZÁLEZ Teología es el franciscano Álvaro de Salamanca. Al mismo tiempo y con la intención de asegurar el éxito de la empresa, mandaba que ningún español fuera a París a estudiar Teología, también como reacción a la oposición francesa a su nombramiento y la actitud suya concreta de considerarse como el verdadero Pontífice. Lo curioso es que la norma seguirá todavía vigente en 1420, por lo que se puede colegir que sus fines políticos seguían vigentes 55 • La apuesta por Salamanca tendrá también su respaldo desde el marco local y sus instituciones vinculadas, dotando a la Universidad de edificios propios, como Escuelas Mayores, Escuelas Menores, el hospital del Estudio, la biblioteca y la capilla. En palabras de Lucía Lahoz, «la empresa del nuevo edificio responde sin duda a las nuevas necesidades espaciales y fun– cionales, pero también registra el interés en formular una imagen arqui– tectónica representativa propia y peculiar en unos momentos en los que la institución ha perdido cierta autonomía política» 56 • Pero, al mismo tiem– po, en su propia organización se trasluce un intento manifiesto por tras– cender ese marco local, de tal suerte que el crecimiento que se pretende no quede agostado antes de ponerlo en marcha. Así se deja ver, v. gr. respecto a las normativas que regularán el nombramiento de rector y vicerrector, que no podían ser naturales de Salamanca ni haber permanecido en ella excesivo tiempo, como para ser considerados naturales de la misma 57 • Era un intento por salvaguardar la representación de los reinos, ya que un año debía ser del de Castilla y al siguiente del de León, pero también se puede intuir que no se quería que Salamanca quedara al margen de toda la estruc– tura del Reino y, lo que era más importante, de los intereses del mismo 58 • En ese juego de equilibrios habría que entender también que los intereses del papado de Aviñón, representados por la entrada en escena de la Teología y la búsqueda de su preeminencia, conjuntamente con el respeto por la tra– dición clásica identificada en el Derecho, especialmente canónico, debían estar en constante equilibrio, puesto que no era un momento de dividir 55 C/ ibid., pp. 145-146, n. 605 (Florencia, 14 de febrero de 1420). En el presente caso se estaba refiriendo a dos dominicos. 56 Lucía LAHOZ, «Imagen visual de la Universidad de Salamanca», en Luis E. RODRÍGUEZ-SAN PEDRO BEZARES y Juan Luis POLO RODRÍGUEZ (coords.), Historia de la Universidad de Salamanca. IV. Ves– tigios y entramados, Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca, 2009, p. 289. 57 Cf Antonio GARCÍA Y GARCÍA, «Consolidación del siglo XV», en Luis E. RODRÍGUEZ-SAN PEDRO BEZARES (coord.), Historia de la Universidad de Salamanca. l. Trayectoria y vinmlaciones, Salamanca, Edi– ciones Universidad de Salamanca, 2002, p. 41. 58 El detalle parece tener cierta trascendencia, puesto que es precisamente en el siglo xv cuando, en palabras de Antonio García, «Se realiza ya en Salamanca el concepto moderno de Universidad, que com– prende no sólo los profesores y los escolares, sino toda la realidad universitaria, donde entra también el resto del personal universitario y las instalaciones, con una personalidad jurídica única que engloba todos estos elementos, aunque bajo ella siga habiendo corporaciones de uno u otro grupo que forman a su vez una corporación dentro de la Universidad» . Id., «Génesis de la Universidad, siglos XIII-XIV», en ibid., pp. 22-23.

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