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202 MIGUELANXO PENA GONZÁLEZ manera, la cultura se convierte en una posibilidad más para superar los límites para hacer que cada uno pueda ser diferente, no perdiendo su autonomía y características más propias, al mismo tiempo que se abre a una nueva realidad en la que él también pueda aportar algo más que su simple trabajo; añadiendo también aquello que es y siente15. e) Ciudadanía. También el que llega tiene algo que decir; su realidad y su trabajo cuentan como el de cualquier otro nacional, y si esto más o menos lo vemos todos como algo evidente, sería necesario también dar un paso adelante en las organizaciones ciudadanas, elaborando nue vos conceptos al margen de nacionalidad que, por otra parte, estamos viendo que es uno de los más devaluados de nuestro presente16. En este sentido, se puede producir un efecto interesante, desde el momento en que muchos de los que llegan, especialmente de Hispano américa, tienen un concepto patrio muy diverso del nuestro, y que podría ayudar a recuperar cierto equilibrio en nuestra sociedad tan con vulsionada y rota en estos temas. Superar las diferencias, hacia un frente común, es aquí algo más que una sueño. 5. DE LA RESPONSABILIDAD Como el lector puede imaginar, el presente título lo hemos tomado de Gio vanni Sartori, en el Apéndice actualizado que, en el año 2001, añadía a su Sociedad multiétnica, y que la tercera edición española presentaba ya en un único volumen. Las palabras del ideólogo de izquierdas, dejaron a muchos con mocionados en un primer momento y, dando un paso más, afianzados por su testimonio, convencidos que después de su reflexión no existe ya ningún incon veniente para optar incluso por el rechazo hacia ciertos grupos de inmigrantes que no se identifican con la cultura Occidental. Utilizamos sus palabras porque nos resultan sumamente elocuentes para aquello que también nosotros quere mos afirmar, aunque discrepando de sus opiniones, o volviéndolas en el sentido contrario al propuesto por su autor. Para él, la ética de la responsabilidad supone asumir también las consecuencias concretas deducibles de una acción 15 Cf. M. A. PENA GONZÁLEZ, “Diálogo o choque de civilizaciones”, en M. A. PENA GONZÁLEZ — A. GALINDO GARcÍA (eds.), Inmigración y Universidad. Acogida del inmigrante desde el ámbito universi tario español, Publicaciones Universidad Pontificia de Salamanca, Salamanca 2005, PP. 125-147. 16 Curiosamente, al mismo tiempo, que en el Estado Español estamos debatiendo qué se ha de entender por “Nación”, y aquí cada uno construye su propio feudo ideológico —que siempre apa rece estrechamente unido a lo económico y a una política del bienestar—, a otros, precisamente en razón de su nacionalidad, se le cierran todas las puertas simplemente por el hecho de tener un pasaporte diferente. No cabe duda que en todo ello se da cierta ambigüedad, e incluso llega hasta lo esperpéntico.

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