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La etapa salmantina del patriarca y sus estudios 259 Una hipótesis podría ser el hecho de que esas cátedras, pudieran estar más cercanas a temas que presentaran al hombre virtuoso como un heterodoxo, lo cual a él mismo, o a sus colaboradores más próximos no podría agradar. Se trata sólo de una hipótesis, pero lo que es manifiesto es que los apuntes de san Juan de Ribera no reflejan toda la formación teo– lógica que recibió en Salamanca, ni tan siquiera para la obtención de los grados académi– cos. Al mismo tiempo, sabemos que, a partir de 1561 es obligatorio cursar en el p1imer y segundo año en la cátedra de Biblia y en una de las dos de propiedad, ya fuera la de Pri– ma o Vísperas. Al mismo tiempo, vemos que las diversas modificaciones de las Constitu– ciones y Estatutos, como hemos indicado, en la mayoría de los casos lo que hacen es obli– gar en el cumplimiento de la legislación anterior que, con el paso del tiempo, iba siendo menos respetada o, por otra parte, a sancionar oficialmente lo que era práctica habitual en el Estudio. Si esto es así, también sería factible que esta fuera la praxis llevada a cabo por nuestro Patriarca. Si aceptamos la hipótesis propuesta por Ruiz Campos y Garrido Zarago– zá78, de que los apuntes que el amanuense fechada en 1555 serían realmente de 1551, ten– dríamos que, en ese segundo año, Ribera habría cursado la cátedra de Prima y Vísperas y, factiblemente, también la de Biblia que, como sabemos, no era incompatible con las ante– riores. Para Navan-o Sorní, sería fundamentalmente a partir de las enseñanzas de Domin– go de Soto, donde el Patriarca "absorbió un biblicismo integral, completo, que enriquecía la Biblia al situarla en conexión con su contexto vital, la tradición viva de la Iglesia y no la empequeñecía reduciéndola a la marchita soledad de la Sola Scriptura" 79 . Por su parte, el meticuloso trabajo de Ruiz Campos y Garrido Zaragozá nos ofrecen también una serie de detalles significativos. Hemos planteado con aúterioridad que, la materia era divida en ocho partes, de tal suerte que el estudiante pudiera recon-er toda la Suma de santo Tomás, sin repeticiones ni pérdidas de tiempo en un lapso de cuatro años, asistiendo a las cátedras de Prima y Vísperas, que explicarían de manera alterna. Este de– talle se vería confirmado por los apuntes de Ribera pero, al mismo tiempo, nos ponen so– bre la pista de que los maestros movían aquellos temas que consideraba más importantes, otros sin lo que hace que cuestiones no sean abordadas en las lecciones. Desgraciadamente los libros de visitas comienzan en el año 1560, por lo que no nos permiten cotejar sus apuntes con lo que estaba mandado leer cada año en las di– versas cátedras. Los apuntes muestran que los maestros no siguen las cuestiones de ma– nera correlativa, sino que hay lagunas en la explicación de los ternas, centrándose y ha– ciendo mover aquello que consideraban corno lo más importante. Con todo, después de hacer un análisis de las diversas partes de la Suma que aparecen recogidas en los apuntes tomamos conciencia de que no parece lógico todo lo que se habría explicado en la cátedra de Prima en el curso 1551-1552, por lo que habría que entender que responderían a dos cursos. Dicha hipótesis nos lleva también a pensar que, dichos apuntes, serían el fruto de los cursos oídos por Ribera para la obtención del grado de bachiller 80 . 78 Cfr. !bid., pp. 20-22. 79 M. Navarro Sorní. op. cit., p. 54. Ciertamente no nos atrevemos a negar esta afirmación, pero sí creemos necesario que sea revisada teniendo en cuenta que, san Juan ele Ribera podría haber optado por un bachillerato en Sacra Pagina. mientras que lo hace por la Teología. Esto no cuestionaría su afición por la Escritura, incluso como Sorní plantea, ya en su Sevilla natal, cuando era niño. 80 Aunque sabemos que la probanza ele cursos se hacía mediante el uso ele otros estudiantes como testigos o que los maestros les firmasen. ¿podría pensarse que Ribera, además ele tener los apuntes para la preparación ele los actos ele disputas los mantuviera también como justificante ele la probanza? Es cierto que dicha hipótesis es muy arriesgada, pero tantos detalles personales y ele los maestros a lo largo ele los apuntes tienen que tener alguna justificación.