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608 FRANCISCO JOSÉ DE JACA Y LA ESCLAVITUD NEGRA Señof Jesucristo y pureza de su Santísima Madre, repito se compadezca de tan tas ruinas. No dudo sea reo de la sangre de tantas almas perdidas, en el tribunal de la Divina justicia30. Esta experiencia, con toda probabilidad, cuestiona la moral rigurosa del misionero que se siente incapaz de comprender algo que le resulta inacepta ble, y ante ello se siente impelido a buscar una solución. A este fin, asume como tarea personal algo que ocupará el resto de su vida: la lucha por la libertad de tos esclavos, especialmente negros. Teniendo esto presente, lo ocurrido en La Habana no será un hecho aislado y sin precedentes; por el contrario se trataba del culmen de unas intuiciones confirmadas y predicadas de manera progresi va. Su postura, lejos de ser improvisada, se había ido fraguando durante al menos tres largos años31. Con todo, en su regreso a España puede estar pre sente también el hecho de que Jaca iba destinado a la misión del Darién con obediencia expresa de que no pudiendo pasar a ella, debería retornar a su provincia. Así aparece en el Testimonio de Autos, cuando se refieren las patentes pertenecientes al capuchino32. Del Testimonio de Autos se deduce que el capuchino aragonés fue recor riendo las rutas negreras, posiblemente con la intención de conocer con más detalle todo el mundo de la trata. Quizás sea éste el motivo de su paso por Cumaná, que nos refiere don Jerónimo de Padilla Guardiola y Guzmán afir mando que Jaca se encontraba en julio de 1681 en dicha plaza: 30 Fr. Francisco José de Jaca al rey Carlos 11(2-6-1 681), f. 65v. 3 Este período de tiempo abarca desde su llegada a Caracas hasta el envío de la car ta a Carlos II, el 2 de junio de 1681. 32 Sobre el proceso llevado a cabo en La Habana es preciso hacer notar que conta mos con una copia del Testimonio de Autos, que se encuentra en AGI, Audiencia de Santo Domingo, leg. 527, f. 7-64, así como una segunda copia abreviada, traducida al italiano. Es ta síntesis se encuentra en el Archivo de Propaganda Fide. Se trata de una copia hecha a partir de la que el vicario general de La Habana remitió al Provincial de los capuchinos de Andalucía y éste, a su vez, envió al nuncio Millini, para que la hiciese llegar a Roma. Esta copia se encuentra en el APF, SOCG, vol. 487, f. 117r-123v. En adelante, utilizaremos ambas indistintamente. Al mismo tiempo, es preciso hacer notar que el proceso original se tiene que encontrar en el Archivo Eclesiástico de La Habana. Igual que debe existir también un proceso civil. Así aparece referido en Testimonio de Auto.r “Y siendo como es esta causa, no sólo del juzgado eclesiástico sino también del secular por las leyes reales recopiladas, que su Magestad tiene expedidas”: Testimonio de Autos llevado a cabo en La Ha bana contra Fr. Francisco José de Jacaj fr. Epifanio de Moirans (27-6-1682,), en AGI, Audiencia de Santo Domingo, leg. 527, f. 40r. Las dificultades para poder acceder a las mismas han sido considerables. Acerca de las patentes, cf. Ibid., f. 55v.

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