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LA UNIVERSIDAD DE SALAMANCA Y EL CONTROL DE LA TEOLOGÍA... 69 otra parte, al optar los dominicos por una línea teológica concreta, las otras tendencias quedaban en manos de otros religiosos. La libertad de cátedra progresivamente iba perdiendo su lugar, viéndose postergada por los intereses institucionales y el proceso centralizador de los regulares. Pero no se trata simplemente de la propiedad y titularidad de las cátedras, sino de una férrea presencia en las estructuras de gobierno. Control que, por otra parte, supera el marco salmantino, introduciéndose en los diversos ámbitos de poder y control en torno al Monarca y las estructuras del Estado, como sería el ámbito privado y personal del confesonario que, desde décadas atrás, venía siendo controlado por dominicos y observantes franciscanos, pero que ya entreveían también la competencia con los jesuitas. El conflicto de las lecturas, como había puesto de manifiesto el prior de San Esteban ante el Claustro de la Universidad, evidenciaba el menosprecio que se hacía en favor de la Compañía de Jesús, así como la poca atención a la plurisecular precedencia de órdenes, que en Salamanca había tenido a los dominicos como teólogos indis- cutibles a lo largo del último siglo. No se puede tampoco olvidar que una amenaza del prior de San Esteban, suponía para el Alma Máter el peligro de una pérdida de fuerzas, en las estructuras de gobierno, de magisterio y de escolares; algo a plantearse con suma seriedad y cautela. Pero si eran los dominicos los que controlaban el contexto universitario salmantino, los jesuitas iban logrando ya una fuerte ascendencia en los entornos cortesanos, que se plasmará en las decisiones que vienen de Madrid. En este mismo orden de cosas, el duque de Lerma, valido de Felipe III era nieto de Francisco de Borja. Frente a la postura institucional de la Universidad, identificada en Francisco Zumel y los dominicos, estaban también las mante- nidas por los estudiantes, mostrando especial atracción hacia la doctrina y lecciones explicadas en el Colegio de la Compañía, lo que hacía que el tema tuviera cierta relevancia. Precisamente eran los estudiantes los que determinaban el control ejecutivo del Estudio nombrando a los vicerrectores. En este sentido, no se puede menos- preciar el papel de los estudiantes, sino que hay que verlos com- prometidos en los diversos conflictos, tanto en el campo académico como en el doctrinal, mostrando así la disparidad de contextos que entran en juego en la vida universitaria 28 . 28 Cf. C. I. Ramírez González, La Universidad de Salamanca en el siglo XVI ..., 71-93.