BCCAP000000000000084ELEC
Ometeca ·XIII • 65 ideológica, desde una concepción de claro regalismo a impulsar la independencia. En este sentido Hidalgo considera la libertad como un valor fundamental del hombre y, por lo mismo, busca la manera más adecuada de justificarla socialmente, encontrando la razón originaria de todo orden social en el pueblo9 5 . Por otra parte, era algo lógico puesto que había sido alumno de los jesuitas. De esta manera, se entiende - glosando las palabras de Villoro- que la declaración de los derechos del hombre, que habían tenido un momento singular en la proclamación por parte de los Estados Unidos de América y, posteriormente, por la Asamblea Nacional de Francia, tenía un fuerte sustrato y soporte ideológico, en los principios y bases asentadas por los autores clásicos hispánicos, aquende y allende los mares, algo que había identificado claramente fray Servando y que no tenía otra solución que la insurgencia 96. Morelos será, sin lugar a dudas, la figura por antonomasia que encame a este clero entre lo político y lo caritativo, presentando el Patronato Indiano como un remedo del anglicanismo herético de Jacobo l y, para apoyar su tesis, acude -también él- a los argumentos de Suárez, que él había aprendido después de 1772 en el Seminario de Michoacán. Contaba además con que el populismo suareciano había 9 5 Cf. ID., El proceso ideológico de la revolución de independencia, 77 . Este tipo de argumentación tendrá su presencia en todos los ideólogos de la independencia. Ya hemos hecho referencia al caso del licenciado Verdad o el mismo Azcárate, que expresaba sin ninguna rotundidad que existía un pacto entre la nación y el soberano, que no podía ser roto unilateralmente. Cf. "Votos sobre la proposición presentada por Villaurrutia," en G. GARCÍA, Documentos históricos mexicanos, tom. 11, doc . 46. Por su parte, Teresa de Mier entendía que el pacto de Valladolid, de 1550, en que se habían elaborado las bases jurídicas de los mtcvos tci11us era la base Je ia Consritucton Americana, por lo que él lo denomina de esta manera. Tomemos, a modo Je ejemplo, un testimonio suyo sobre la ansiada libertad: ''Los que están acostumbrados al silencio que reina en las monarquías. a l derredor de la tumba de la libertad, se escandalizan de la magnitud y divisiones que hay en una república, especialmente al principio, cuando se están zanjando sus cimientos. Estos son los síntomas de la libertad naciente, en lucha con los humores de la esclavitud que están haciendo crisis. Intenta andar libremente el que estaba cei'íido con las fojas de la infancia y se dará mil golpes, hasta que con el ejercicio se robustezca y la experiencia le enseñe las distancias y los riesgos. Tropieza igualmente el que acaba de soltar inveteradas cadenas. Las inquietudes posteriores son efecto de la misma libertad." S. TERESADE MIER, Memoria. Unji·aile mexicano desterrado en Europa, Madrid, Trama editorial, 2006, 309. 96 Cf. L. VILLORO, El proceso ideológico de la revolución de Independencia, 59. CI'. S. TERESA DE MIER, Memorias. Un.fi·ai/e mexicano desrerradu en Europo , 239. Acerca de los insurgentes: E. VAN YOUNG, La otra rebelión. La lucha por la indep<1ndencio de México, 1810-1821, México, FCE, 2006.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz