BCCAP000000000000082ELEC

528 MIGUEL-ANXO PENA GONZÁLEZ “tienen por cierto el derecho de los amos”. Demuestra como los negros, además, están dotados de conocimiento cierto, entendiendo que muchos bozales se entor pecen en razón de los trabajos a que son sometidos, siendo más inteligentes en ciencia y prudencia que sus amos. Así, el recurso al Filósofo le sirve para mos trar que hombres con ingenio no pueden estar lícitamente sometidos a individuos tan “imprudentes, ignorantes dados a la avaricia y a la lujuria, que ciega la mente y aparta a los sensatos de la sensatez”148. No es comprensible tampoco, desde su contexto ético-moral, que cualquier hombre, dejando al margen su condición o color de piel, se pueda enriquecer sin trabajar’49. Podría ser un adelanto a las interpretaciones elaboradas por la leyen da negra, y que aquí tendría también una interpretación peculiar e interesante. Por lo mismo, la manera de proceder de los españoles, lleva a que las grandes riquezas de las Indias no beneficien para nada al reino, ya que “los españoles lle van el peso y otros el éxito”150. Mientras estos quedan evidentemente como inhu manos, los demás europeos en las Indias se dedican a los propios deleites, sin preocuparse realmente de trabajar, por lo que “hoy los españoles son esclavos de las otras naciones: por llevai-les oro y plata, se exponen a los peligros y trabajos de navegación y sus almas a la condenación eterna; y las demás naciones gozan de la plata y el oro que les han llevado con mucho trabajo y peligros de alma y cuerpo”’. Concluirá esta amplia sección considerando que todo permanecerá igual, puesto que todos tienen intereses en la trata, por lo que no se hará nada para que esta situación pueda cambiar de rumbo. Con la intención de remover las con ciencias, hace una breve descripción de la realidad, respecto al trabajo de los bozales: “Que los esclavos no llevan a mal un trabajo persistente, es falso; hasta tal punto, que muchos se ahorcan, otros se cortan la garganta con cuchillo, otros se desgarran, otros se lanzan por el precipicio, otros escapan, otros, fugitivos, 148 ibíd., 117. A este respecto conviene tener presente la opinión de Aristóteles. cfr. Aristóteles, Políticci lib. tu, n. 4, Madrid, 1951, p. 1277b: “Existe, en efecto, un cobierno pi.opio del amo, y llamamos así al que se ejerce acerca de los servicios necesarios, que el que manda no necesita saber hacer, sino mús bien utilizar; lo otro sería servil. Llamo lo otro a ser capaz de des empeñar los trabajos de servicio. Decimos que hay varias clases de esclavos, pues stis oficios son varios. Una parte de ellos la constituyen los trabajadores manuales; éstos son, como da a enten der sti nombre, los que viven del trabajo de sus manos, a los cuales pertenece el artesano. Por eso antiguamente los artesanos no participaron en algunas ciudades de las magistraturas hasta que vino la democracia extremada”. 149 “Porque a causa de la avaricia los españoles no hacen ni buscan otra cosa que las Indias, dando de lado a lo demós; porque por las Indias pierden otras tierras patrimoniales y por las Indias se escinde la monarquía en partes: por las Indias también qciedarú destruida”. tbícl., 118. 150 Ibíd. 151 Ibíd. Sería interesante detenerse en un estudio comparado de esta interpretación, a partir de la amplia literatura recurrente a la leyenda negra, para mostrar como, los mismos auto res entienden que un proceder inmoral trae consigo este tipo de consecuencias.