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LA «ESCUELA DE SALAMANCA»: UN CONTEXTO SINGULAR 15 conciencia moral, con repercusiones concretas e ineludibles en el campo jurídico y en la misma organización social. De esta manera, podemos especificar tres polémicas, desde el ámbito social y político, que serán las que marquen la clave del pensamiento hispánico. Se trata, en primer lugar, de la cuestión de los títulos, respecto al dominio español en América, en un paso sucesivo, la problemática sobre la obediencia o desobediencia civil, en confrontación con las concepciones políticas autoritarias y teocráticas del momento y, por último, el debate sobre la libertad de los mares. Estos tres aspectos, con una fuerte relevancia social y política, serán abor- dados a partir de una teología de corte práctico, proponiendo o consolidando una vía nueva, con una metodología propia, que va determinando un saber y una ciencia independiente. De esta manera, la vinculación entre moral y derecho se pone de manifiesto. Uno de sus principales y primeros exponentes será precisa- mente Domingo de Soto con la publicación de su Tractatus de Iustitia et Iure , en el que, desde una visión teológico-moral mantendrá un diálogo constante con el mundo del derecho. El otro aspecto, que no ocupa menor importancia en la reflexión de los teólogos de la «Escuela de Salamanca», pero que sí ha podido pasar más des- apercibido, por tratarse de un entorno estrictamente teológico es, precisamente, el de la reformulación teológica de las verdades de la fe y que atiende al amplio campo de la teología, expresado en el presente estudio en torno a los sacramen- tos, donde también ellos, aunque todavía dependientes de una fuerte lectura de corte juridicista, son capaces de precisar y ampliar la reflexión que se venía manteniendo hasta el momento presente. 2. La «Escuela de Salamanca» Siguiendo en línea de continuidad, con la opinión de Mair, Francisco de Vitoria entiende el quehacer del teólogo, como algo estrechamente vinculado con las demás ciencias del saber. Por lo mismo, el teólogo está obligado a cono- cer e implicarse en todas las cuestiones, no sólo en las que dicen una referencia directa a la fe y su formulación sistemática, sino también a todo aquello que afecta a los hombres en su vida cotidiana, tanto en el campo más estrictamente moral como en referencias más formales de funcionamiento del Estado, algo que aparece claramente manifiesto en sus diversos escritos.   El tratado de Domingo de Soto, será el prototipo de los siguientes tractatus de iustitia et iure . Su primera edición tiene lugar en Salamanca en 1556, a la que seguirá un amplio número de ediciones. Para la evolución de la obra, cf. D. de S oto , De iustitia et iure libri decem . De la justicia y del derecho en diez libros , t. I-V, V. C arro (ed.), Madrid, Instituto de Estudios Políticos, 1967-1968.