BCCAP000000000000052ELEC

CON'ITNGENCIAS FRONTERIZAS BAZTÁN-BIDARRAY "Y fuera de dichos límites, será el prendamiento de cada rebaño de ovejas, de veinte arriba, 8 reales por una vez; y no llegando a dicho número, 4 reales, de noche; y de día, la mitad". El ganado de cerda sorprendido fuera de los límites fijados, tendrá pecha de medio real de día y uno de noche, por cabeza y vez. Expresamente se determina que cada vecino responde por sí y en ningún caso mancomunadamente. Antes de estampar la firma entran en el arriendo otros dos vecinos: Juan Zaldain, dueño de Iruguilera, por 4 reales y Juan de Legarrea, dueño de la casa de su apellido, con un estajo de cabras por 2 reales ". Aunque se declara vigente el presente contrato de arrendamiento hasta el año 1755, se renueva en 14 de junio de 1751, en 14 de julio de 1754, el 3 de octubre de 1758 y en 1764, con leves variantes en las tasas de arriendo y alguna novedad en el vecindario: Petri Capezuri, Ramón Osirart, Juanes Sabat Callea, Martín Beguieder, Domingo Bizarsagu, que debe de ser el heredero de Bernart Bizarzau o Bizarzuru, variantes de un mismo apellido, según los escribanos a sus amanuenses. No sé si por influjo maligno de sus vecinos baigorrianos, que tanto perturbaron la paz fronteriza con sus pérfidas ocupaciones de los Alduides, o porque la ganadería de ambas comunidades, la baztanesa y la de Bidarray, comenzaba a disputarse unos mismos pastos, se quebró la pacífica conviven- cia de sus respectivos dueños. El conde de Ornano, caballero de la Orden Militar y Real de San Luis, Francois Marie, mariscal de campo, se vio precisado a detenerse en San Juan de He de Puerto, cuando, procedente del Escorial, se dirigía a París para presentar al monarca francés el tratado de límites firmado en Elizondo con el mariscal de campo español, Ventura Caro, el 27 de agosto de 1785. A su paso por Pamplona le habían notificado ya las inquietudes suscita- das precisamente en la zona que se consideraba definitivamente ajustada. Los vecinos de Bidarray, "con probada mala fe y en colaboración con los senticas o costieros (guardas forestales)" habían apresado 81 puercos de vecinos baztaneses y obligado a sus propietarios a pagar la "exorbitante pena" de 54 pesos fuertes, más una peseta. Las autoridades del valle recurrieron a los comisarios Ornano y Caro, al virrey de Navarra, Manuel Azlor, y al gobernador de Bayona, marqués de Caupenne. El Virrey de Navarra remitió cartas de recomendación a Tiburcio Hualde, alcalde de Baztán, para el comandante gobernador de Bayona y para el cónsul español en la misma ciudad; y el gobernador de Bayona, de acuerdo con el mariscal conde de Ornano (dotado de especiales poderes en las cuestiones fronterizas), manda arrestar a un jurado, dos síndicos guardas forestales y al escribano d'Itourbourou, vecinos todos del valle de Osés, hasta el total reintegro de lo cobrado. Dura el encierro en el castillo viejo de Bayona, desde el 9 al 17 de diciembre de 1785 '*. 11. Archivo de Baztán, en Elizondo; leg. 160. Véase Apéndice 1. 12. Manuel de Azlor, Gobernador Civil de Navarra a don Tiburcio Hualde, alcalde trienal del Valle y Universidad de Baztán. Pamplona, 17 de noviembre de 1785. Don Tiburcio de Hualde al jurado de Ossés, Elizondo, 9 de diciembre de 1785. VEILLET R, Recherches, ID., pp. 1.125 y 1.128, nota 2.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz