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Descortezar o cortar por su pie fresnos y acebos «para dar de comer al ganado ni pava hacer liga» se penaliza con un florín ( ord." 15 ) . Los incendios de términos comunes, atribuídos generalmente a los gana- deros y pastores, debieron de constituir atentado endémico; al pirómano se amenaza con 30 florines de multa y reparación del daño causado. Mas como generalmente se provocan de noche y en secreto, «se hordena que se haya de traer y se trayga escomunión* (ord." 29 ) . Con la institución del bolsero o tesorero cobra mayor evidencia la auto- nomía administrativa del valle y universidad de la tierra de Baztán (ord." 9 ) . B) ORDENANZAS DEL ARO 1603 «En el nombre de Dios y de la Santissima Trinidad. Estas son las Orde- nanzas, cotos y paramentos antiguos y biejos.. . agora nuebamente recopila- dos, enmendados y corregidos. .. » En Junta y Concejo general, pleno y abierto, celebrado el día de San Miguel de septiembre de 1599, por el alcalde, jurados, gentileshombres y vecinos del valle de Baztán, se comisionó la formación de Nuevas Ordenan- zas a don Pedro Arráyoz de Zozaya, cuyos son los palacios de Zozaya y Arrá- yoz, alcalde de Baztán; a don Pedro de Jaureguízar, señor del palacio de Jaureguízar en Irurita; a Juan de Echenique, señor del palacio de Vergara en Arizcun; y a Martín de Elizondo, escribano real y vecino de dicha loca- lidad. En nuevo concejo, pleno y abierto, que se tuvo el tercer día de Pascua de Resurrección del año 1603, se encomendó a sus autores ( salvo don Pedro Arráyoz de Zozaya, difunto a la sazón) revisar, enmendar y completar los artículos de ordenanzas que se presentaron en dicha sesión; se agregaron como asesores del alcalde trienal don Pedro de Vicuña y Zozaya, cuyos son los palacios de Arráyoz y de Zozaya, los señores don Ojer de Ursúa, señor del palacio de Apeztegui en Errazu; el bachiller don Juan de Ordoqui, rector de la parroquia1 de Azpilcueta; Juan de Echayde, señor del palacio de Aroz- teguía en Lecároz; el bachiller Jáuregui, rector de Ciga; don Juan Echenique, rector de Berroeta; Juanes Jáuregui, cuyo es el palacio de Almándoz; y va- rios otros vecinos eminentes, cuyos nombres se detallan. Incorporaron las 32 ordenanzas, que hemos analizado, del tiempo de Sancho de Iturbide y añadieron como «Nuebas Ordenanqas», desde la 33 a la 57, con plena vigencia de unas y otras, a perpetuidad. Presentaron su trabajo en sesión plenaria del jueves 15 de mayo de 1603 y rogaron al escribano Miguel de Narbarte asentarlo por auto público, como se hizo. «Firmaron los que sabían escrebir por sy y por los demás que no sabían, juntamente con los dichos testigos y con mí el escribano: