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se mantuvo una curación clínica permanente, cifras en retroceso lento y tardío. Por este motivo pienso que la inmunología ofrece aún aspectos no suficientemente conocidos y su curso evolutivo depende de factores no mensurables. No creo que pueda ser un criterio determinante en el diagnóstico y en la terapia de las leishmaniasis. Publicar nuestras experiencias El año 84 aparecieron dos publicaciones mías sobre leishmaniasis. Una, en folleto aparte, en la colección Cultura quichua, de CICAME, bajo el título Leishmaniosis en la Región Amazónica Ecuatoriana. Síntesis y terapias nuevas. 35 pp. Y como capítulo en el libro Salud y Enftrmedai Patología Tropical en la Región Amazónica Ecuatoriana. 100 pp. En el año 91 publicaba otra pequeña obra Estudios sobre Patologías tropicales en la Amazonta Ecuatoriana. 120 pp. En ella se incluía un capítulo con una actualización del tema de leishmania sis. Con aspectos del mismo tema participé en dos eventos internacionales. En el VI Congreso Latinoamaricano de Parasito logía, en Sao Paolo, Brasil, en septiembre del 83, con el tema Terapia con Nfurtimox en Leishmaniosis de la Región Ainazóni ca Ecuatoriana; y en el VII Congreso. Latinoamericano de Parasitología, en Guayaquil, octubre del 85, con Leishmaniosis en la Amazonía Ecuatoriana. Clínica y terapéutico. Un intento fallido de colaboración En noviembre del 85, en una de las muchas cartas que intercambié con la Dra. Saravia sobre la investigacíón inmunoló gica de nuestros sueros para leishmaniasis, apareció el tema de la posibilidad de una visita a nuestro hospital por parte de un 49