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372 promuevan el trabajo compartido, 94,4; los hermanos que viven fue- ra de nuestras casas complázcanse en permanecer en ellas algún tiem- po, principalmente para los retiros espirituales, 99,3; dediquémonos en todo tiempo a obras de peni- tencia, 110,3; consideremos como tiempo de penitencia más intensa, privada y comunitaria, el adviento, 11,4; quien ha ejercido el cargo de guardián durante el tiempo máxi- mo permitido, quede libre de él al menos por un año, 139,4; los guar- dianes no asuman tareas que les alejen demasiado ni excesivo tiem- po de la casa, 139,5; el mandato del delegado no puede prolongarse por más tiempo que el de un guardián, 8/25,5; los ministros, en casos par- ticulares, pueden autorizar la ad- ministración individual del dinero, pero por un, 4/3; todos los ecóno- mos, administradores y guardianes rindan cuenta exacta de la adminis- tración, en el tiempo y modo esta- blecidos por los ministros, 4/12,1; los hermanos capitulares pierden la voz activa si, sin dispensa legítima, no están presentes en el Capítulo durante todo el, 8/17,3; el minis- tro general, durante el tiempo de su oficio, visite a todos los hermanos, 10/1,1; los guardianes y ministros, en el tiempo oportuno, den cuenta al propio superior inmediato de lo llevado a la práctica, 10/2,3. – Tiempo y oración : en las circuns- cripciones se den indicaciones para que al menos un tiempo de medita- ción se haga en común, 3/3; nece- sario para los ejercicios espirituales, 56,1-2; garanticen a los hermanos y a las fraternidades el tiempo y la calidad de la oración, 161,1; las fra- ternidades de retiro estén abiertas para aquellos que deseen transcu- rrir en ellas períodos de, 57,3; dedi- quemos fielmente un espacio sufi- ciente de tiempo a la lectura orante de la Sagrada Escritura, 53,3; para compartir la Palabra de Dios, 53,4; dediquemos un espacio de tiempo más amplio al cultivo de la oración mental, 54,1; cada hermano tóme- se todos los días un tiempo sufi- ciente para la oración mental, 55,2; los Capítulos provinciales y locales provean a fin de que todos los her- manos dispongan todos los días del tiempo necesario para la oración mental, 55,3. – Tiempo libre : los hermanos tengan un poco de tiempo libre para de- dicar a sí mismos, 86,1; dese a los hermanos un tiempo de vacacio- nes, 86,2; corresponde a los Capí- tulos adoptar normas adecuadas, de acuerdo con el criterio de la equi- dad fraterna, con respecto a las va- caciones y al tiempo libre, 5/1. Tiempo y lugar ( cf . Pluriformidad), procuren los ministros que, aten- diendo a la diversidad de regiones,