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308 de cualquier época, 3,2; servicio a Dios y a los, 17,1; con los demás, 26,6; en favor de todos los, 49,1; los hermanos hagan patente a los, 71,1; induciendo a los hombres a la consciencia, 72,5; para utilidad de los, 73,4. – Los hombres y nuestra vida : al ser- vicio de los, 10,3; bajo la dirección del Obispo diocesano, 11,3; her- manos de todos los, 13,2; entre los hombres y los pueblos, 13,4; el deseo de que los hombres lleguen gozosos, 15,5; su mensaje a los, 16,4; sirviendo a todos los, 16,5; la salvación de los, 18,3e; pedi- mos limosna a los, 67,4; de modo que los, 106,3; puede manifestarse a los, 108,4; se realiza la plenitud del, 158,3; con los hombres y con todas las criaturas, 158,4; como pobres y hombres de paz, 168,5. Homilía , a los hermanos en la ce- lebración de la Eucaristía o de la palabra de Dios, 161,4. Honorio (Papa) , confirmó la Re- gla de san Francisco, 21,4; 185,1. Horario de la casa , el Capítulo lo- cal disponga el horario de la casa y del trabajo, 49,5. Hospitalidad, Huésped , los cri- terios de la sencillez, de la pruden- cia y de la, 95,3; a los propios súb- ditos y a los, 186,3. Huella v. Imitación Humanidad, Humano ( cf . Hom- bre), de todo el género, 10,1; un ideal de vida rico de valores, 17,1; lo que se refiere a los valores, 23,2; el elemento humano y el espiritual, 26,2; los misterios de la humanidad de Cristo, 52,5; cooperamos con el Hijo de Dios a la redención de la, 78,6; demos testimonio del senti- do humano del trabajo, 78,7; para hacer del género humano una fra- ternidad, 88,2; espacio humano ha- bitado por la Trinidad, 88,3; cuan- to el ingenio humano ha logrado de las cosas creadas, 105,3; por la uni- dad del género, 107,4; las exigen- cias de los diversos grupos, 150,6; favorece el desarrollo, 173,5. Humildad, Humilde ( cf . Minori- dad, Obediencia, Pobreza), Cris- to pobre, 2,1; Cristo pobre, 10,3; viniendo a nosotros en humilde apariencia, 14,1; conmovido ínti- mamente por la, 14,2; participan- do con verdadero amor de sus ca- lamidades y humilde condición, 14,3; sigamos a Cristo pobre y, 16,4; revestidos de Cristo manso y humilde, los signos de humildad, animados por el espíritu de, 35,4; cuando vivimos con Cristo pobre y, 46,3; adoremos con fe, humilde reverencia y devoción a Jesucristo, 48,4; Francisco admiraba el amor y la, 52,5; custodio del Redentor y trabajador, 52,7; es misterio de … fundamento de nuestra vida de pobreza y, 60,1; la suprema mani- festación de la, 60,2; la belleza de