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307 Hermanos que salen de la Or- den , tengamos respeto fraterno con los hermanos que salen de la Orden, 103,3. Hermanos forasteros ( cf . Hospi- talidad, Huésped), viviendo como peregrinos y forasteros en este mundo, 5,3; hospedándonos siem- pre en ellas como peregrinos y fo- rasteros, 73,1. Hermanos que viven fuera de la casa religiosa , incluso a los que, 56,2; tienen que, 99,1; permanen- cia prolongada, 6/4,2. Hijo de Dios v. Cristo Historia , la observancia de la Re- gla, como de la, 26,5; estudio más profundo de la, 32,3; en la historia de la salvación, 45,2; amor de Dios en el entramado de la, 50,4; como atestigua la, 55,6; en la historia de la salvación, 60,1; Dios que está presente y actúa en la, 108,5; acompañan el camino de nuestra Fraternidad a lo largo de la, 145,1. Hombre ( cf . Humanidad, Mundo, Sociedad) – Cristo, la Iglesia, san Francisco, hom- bre : de la Iglesia y de los, 21,4; se pone interiormente a la escucha de la voz de Dios, 45,1; en la vida de los, 45,2; nos transformamos en Cristo Dios-Hombre, 45,3; tes- timonio de una auténtica oración, 45,8; amor de Cristo por el, 50,2; las necesidades de los, 50,3; las an- gustias de todos los, 50,5; por to- dos los, 51,1; haciéndose semejan- te a los, 60,2; en la caridad hacia los, 61,1; siervo entre los, 61,2; los hombres que las ansían con avidez, 61,5; disponibilidad para con Dios y con los, 77,3; corresponde al de- signio primigenio de Dios, 78,1; dar a los hombres testimonio de Cristo, 81,5; las necesidades de los, 95,5; no sólo a los, 105,1; el mundo de los, 105,4; reformar a los hombres con una vida nueva, 106,1; viviera y actuara entre los, 106,2; colabo- radores de los hombres de buena voluntad, 108,5; llamó a los hom- bres a la penitencia, 109,1; nuevas relaciones con los, 109,3; Francis- co animando a todos sus hermanos, fueran hombres penitentes, 109,5; para con todos los, 146,4; colabo- rar en la salvación de los, 148,2; a las necesidades de los, 149,1; to- dos los servicios prestados a los, 149,7; se une con los hombres de cualquier condición, 153,2; el Se- ñor ha sembrado en el corazón del, 156,1; el ejercicio del amor a Dios y a los, 157,1; transforma al hombre totalmente, 169,6; puede saciar to- talmente el corazón del, 170,2; don concedido a los, 171,2; conquistado por el amor a Dios y a los, 173,1; en Cristo que es Dios y hombre, cons- tituido por el Padre juez, legislador y salvación de los, 189,2. – La fraternidad y los hombres : com- partámosla con todos los hombres