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Prologo. 'Zidad ai'i con parientes, y aliados en España, como con los Moros de Africa, permitiendolo el Cielo, y armando en aquella hacion l_l! <Jivina juliciarayos con que.havia de caíl:igar los pecados de Vuitiza, y del Rey Doil Rodrigo en fu perl'.Ona , y fus vafallós, fucedlendo á Jos Principes lo que á los Pl~netas luminares, de cuyos defeél:os en fus Eclypíes paga el mundo la pena. . _ . _. . Solicitó , y configuió Don folian del Rey Vlid Miramamoliti gente, y armas auxiliares que tonduxo á las Coftas de España con difimulacion, y juntos con los de fu partido 1 que cauce lofos le ef– peraban, hizieron grandes daños en los lugares maritimos; embian– do á Africa muchos despojos, y prifioneros, y luego le embió dé socorro doze mil combatientes conducidos por Tarifa, Benzatca, coli que pudo focilll'tente ocupar á Gibrltltar, y Tarifa. Efl:os progresos encendieron la ambicioti dei Rey Vlid; juzgando que el Cielo le daba ocafion para ampliar fu imperio, y eíl:eiider la feél:a Mahometana por E$paña, y con efl:e !ln fe aumentaron las ar– mas aux_iliares en gran numero. Turbaron efl:.is nuebas el animo dei Rey bon Rodrigo, y antes que creciefe el daiío, embio contra Tarif un exercirn á cargo de Do~ Sancho, á quien algunos llám:in Don Ynigo fu primo hermano, for• tnado de gente vifoiía 1 dada á las delicias, y el General fln expe• rien.ci ~, y dispueíl:os los Esquadrones de uno , y otro exercito fe acometi_ero n con gr_~n refolucion; pero fe declaró la victoria por los Atricanos, haviendo muerto Don Sancho; y figuiendo los cavalloii !llarves el alcmze con mucha mortandad de Chriíl:ianos; goz_ando de I~ ocafion que les daba la victoria entraron por Andalucia, y Lu– fitania, oc1:1pando muchos Pueblos, y principalmente á Sevilla. De efl:as victorins de Tarif, y de los trofeos , y def¡iojos aican• zados, corrió la fama por las Provincias de Africa; la qua! falcó ~uego por EsNña fus fierpes, irtulidandola con nuevos diluvios de _gei¡te. . . . . . · Ballofe el Rey Don llodrigo en gran éonfufion con eíl:as iloti• cias, y reconociendo, que ya fe trataba de la fuma de las cosas, en .que era forzofo pone.ria> al lance de una batalla , y que á ella afis– tiese fu persona; con eíl:a resolucion llamó á la Nobleza; y á todos }Ds que en el Reyno podían tomar armas, y formando un exerci!b -Oe mas de cien mil hombres marchó con él ; y fe preferitó cerca de Xerez fobre las Riberas de Guadalete ; donde pueíl:os frente á frente }r;i~ ~s_qua(_Ü'one~, coµiumietoli liete dias eli efcaramuzas, y dif¡iutat al•