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-i2- anima. es la de un padre. de nuostro Padre call1Ull. que re– cibe 3.o-1'adecido el "OCOI'I'O con que sus hijos lo atiend en eu su esc~scz y en sus penas . Ofrece rogar al Ciclo pOl'llosotl'O~ para que el Sefiol', dador de todo bien, nos colme de oCtlcfi– cios. y no será por cierto infundada la eSpCL';\nza . que nos inspire la arucian ocl Pontifice, :í quien Dios cleni ra de cntre los homb¡'cs para que pOI' ellos y por su.,; pecados ofrezca dones y sacl'ilicios . Como olv idado de sus propias angustias, dedi ca su atcnoian con lH'cfcl'cncia a todo otro pensamiento al do la salvucion do los puebl os. y do llUC\'O IlOS encarece la necesidad de no cejal' en la solicitud con q uo al pasl) q uo defendamos la causa, los del'echos y la doc – trina de la fg-lc>:ia , ¡ibel'temos los pueblos de las asechanzas que a ~ u felicidad temporal y eterna se oponen. E l Padre Santo t iene fija la vista en esa gueITa cada elia mas procaz y a tl'cyida que sio CC;;(1.I'"e hace á la virtud, ;i la piedad. á la H.eligion. ora por medios indirectos encaminando la acti– vidad .Y energía de las almas a la posesion de la materia y 109 goces que de ella afanosamente se dC!'i"an, Ol'U di ¡'ccta– mente asestando rudos golpes a la doctrina de la "el'dad y li sus maestros, a las instituciones y ,i los que de Dios han recibido el ca¡'go de mantenel'las.,! aplical'las á la humani– da rl y ,i s u marcha por la rápida COlTiente de los siglos; y con el Padre Santo están, sin faltar uno. Jos Obispos diSt~minados por todo el orbe, desenb¡'lcndo las maquinaci1mes de los eoemig-os, Nos, que estamos acostuUllwad os á seüálal' los peligL'Os donde quiera que obse!'vamos amagan ú esta precio!;;! parte de la grcy de .JesllCl'isto tl nuestro cuidado co nfiada, correSpO¡H[(~mos á la paterna escitnci oll q uo s u Santo Vicario nos dirige. ¡'ellO\,¡lndo las advertencias y amonestaciones pastol'ale:; que lle"amos publicndas sobre las causas do de;:;l l'u cc ion y ruina que pOl' todas p:l\'tcs nos cercan , y muy prilleipalmcntc sobre el desun!cn de las idens y trastorno de las inteligcllcins en los aciagos t.iempos en qu e \'iv irnos . Un nuevo jllles, os prcvc:nimos, amados dio– cesanos , conÜ'a la lectul'a de escritos pCl'l1i(' iosos , r¡ue Hilas "cces en"lle!tns en el af'omodatici o manto ele la polltica, ot!':u; cn el (leslumlH'adol' de 1:1 ciclH' ia, Ó ('11 el hipuC'l'ita de la f'ilautr opí a, propinan el "en e llO Ú la SO(~ielbd. quc ,~Jl yez del ade de g-ohernal' :lJll'l'llde l'1 de destrujl', él! \'cz de la cienri;\ se fJuerla t'OIl la eluda yel í'>:.cepticislIlo. y e l! \'ez de los ópimos (['litO>; de la l'cdenci on dd alma pOI' J eS\lc¡'isto, se h alla con los gl'Osel'os y di;;.ipadores de la I'cdcnt'irm de