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254 LA BELLAEASO -"Artículo 486.-El que contrajere segundo 6 ulterior matrimonio, sin hallarse legítimamente di– suelto el anterior, será castigado con la pena de pri– sión mayor,,. La duración de ésta puede ser-aña– dió_pasando otras hojas-de seis años y un día, á doce años. Lajumera se puso pálido. - Gracias. No me conviene una estancia tan lar- ga á la sombra. -¿Por tanto..... -Sí, la cosa es verdad. -Ah, pillín! La moza valía la pena... ¡bocado,no de cardenal sino de papa! Los ojos de Peláez chispeaban de lujuria. Los dos amigos se despidieron con un afectuoso apre– tón de manos. Lajumera cayó desfallecido sobre su asiento. Creía haberse acostumbrado á la idea de la catás– trofe, después de tantas cavilaciones; pero ésta, al suceder, le anonadaba cual si fuese imprevista. Le cogía desprevenido, sin plan resuelto, con un vago proyecto de fuga..... Veinticuatro horas transcurren pronto. La rápida sucesión del tiempo se le hacía palpable en la conciencia y le privaba de serenidad para discurrir. · Revolviendo pensamientos paró la atención sobre un aviso de Peláez: le buscaban el bulto por algu– nos artículos de La Guerra Social. La salida inútil– mente buscada tomó cuerpo en el cerebro de un modo casi automático. Las piezas de la construcción se ajustaban por sí mismas..... Fingir una persecu– ción de índole política; trasladarse inmediatamente á Eguren; pintar con vivos colores el peligro qt,1e corría de ser reducido á prisión en el término de veinticuatro horas; pedirle á su suegro, por lo me– nos, el pico de la dote de Tomasa que voluntaria– mente se había abstenido de levantar hasta enton-