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A. CAMPIÓN 199 -Siempre anduvo tras de ella ..... -Esas opiniones de socialistas, ó como se llamen ... -Antes las tuvo peores. · -No es de nuestra clase! No es basko! -Mala gente para los caseríos ... en la calle, psh. -Eguren es pequeño; yo formé un plan..... La Tomasha estará de sobra, ó poco menos. Tampoco sirve para las labores campestres; me la habéis v~el-' to señorita. · -Que se quede en la calle, que se case. -S i ese Perico tuviese la hombría de bien que dice..... Anduvo con aquella mujer de mala manera. -Pero se portaba bien! la mantuvo, la cuidó en– ferma durante muchos años. Ahora nadie puede vi– tuperar su conducta. -Ni entonces tampoco, fuera de aquello ..... No es jugador, no es borracho, rto es holgazán..... Ah! si no hubiese ocurrido eso de la muerte ..... -¡Claro! ni el mismo Perico se atrevería á pre– tenderla.:... nos lo afirmó. - Tomasha se ha desacreditado: con culpa ó sin ella, el caso es igual; la gente cree lo peor. -N o es posible casarla á nuestro gusto . . -No caben exigencias ni pretensiones. Esta consecuencia, á que le constreñía la · proce– sión lógica de los pensamientos, arrancó á Martín . un suspiro muy hondo. Joshepa la había deducido desde las últimas frases de Lajumera, en quien víó el clavo ardiente de los asimientos supremos. -No caben, no ..... Ah, sí supieses! Por no afli– girte me callé: la Tomasha, hace meses, tuvo un descuido. Andre J oshepa bajó tanto la voz que casi no se oyeron estas paiabras. · - Lo sabía-replicó Martín sin inmutarse. - Cómo, cuándo, quién?-preguntó á borbotones la andre.