BCC00R49-5-16-1700000000000000410

272 LA BELLA EASO - -Hombre, pasiensia; ya acabaré.. ... El padre se había ido á vender sus bueyes á Goyerri, porque ahora acabará su labransa; andre joshepa, lista, bien dispuso la casuela; el día de hoy, Martín fue– ra andaría ..... Pero el hombre, no sé cómo, vend ió los bueyes más serca y ha venido esta tard e, cuan– do la prosesión ..... Se reunió con las lavanderas de Loyola, allí, en Avenida; pasó la hija, tan ederra y..... todo el mundo chaloka, y..... el hombre cuan– do la conosió se puso aserre; quiso subir al carrosa pa tirarla de allí á la hija, patas abajo. .... Los sela– dores al depósito llevaron ..... ahora el señor alcal– de, que sacasen mandao , y ha vuelto á casa, ¡oh! hay que ver ..... Jesús, cómo está aquel hombre! no es el de antes ..... le ha pegao á la mujer ..... manda que se evuelva la hija, pero si la ve con e l traje de bella, capas de matar es .... -- Bueno , y qué hacemos? - preguntó Raimundo, contrariadísimo. - Eso, usted dirá; yo..... -La Tomasha no puede desnudarse aquí, en el pasillo ..... á dónde la llevamos? A casa de usted ..... - No puede ser; nos verá el hombre; anda por todo; arriba, abajo ..... Raimundo, rascándose la barba, reflexionó. Su ceño repentinamente se desarrugó. -Tengo la solución . Llévela usted en el coche de D. Juan Bautista, que espera abajo, á casa de la Ramona, calle de la Mota, 15, 3. 0 •••• • - A la Ramona Zubikoa? -Sí; á la que fué mi niñera hace veintiséis años ..... -A aquélla? - Qué le hemos de hacer..... Usted la lleva y la trae ..... -Bueno, la acompañaré hasta puerta de habita– sión; la dejaré allí..... Estoy muy prisosa; yo he de re-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz