BCC00R49-5-16-1700000000000000410
loO LA BELLA EASO hubiese jurao el mismísimo San Isidro Labrador y le hubiese contestao: Santo, no me vengas con in– fundios. Me dijeron las señoras que para ponerme en franquía de recibir el socorro era preciso vivir honraamente, apartarme de ti..... Yo no las enten– día... por fin se descubrió tu embuste, canalla! y no lo desmentí por lo que yo me sé ... Les habían contao que tú y yo vivíamos arrimaos; tú se lo haces creer así á tus compañeros, y éstos te pregonan como el mejor de los hombres. Claro! no te desamarras de tu enferma, de tu vieja que ya no sirve pa divertir– te en la cama, y la mantienes gastándote una barba– riá en médicos y boticas. Dicen que dices que esto prueba lo santo que es el amor libre: ¡el nuestro! El deseo de puntualizar la denuncia de Ashunsi contenía los ímpetus iracundos de Lajumera. La voz ronca y el tonillo chulapesco recalcaban las in– jurias. A la exclamación final, en tono de insultante ironía, siguió el estallido de la pena, cebado por el recuerdo del ultraje, y la pobre mujer incíinó la ca– beza, y extenuadas las fuerzas cayó, mejor que sen– tóse, llorando sobre la cama. Lajumera apretó los puños y los agitó amenaza– dores delante del rostro de Florentina. -Si pudiese esconder tu"podrido cuerpo donde nadie le encontrase ... ahora mismo te mataba! Me– tiste aquí á las espías de los jesuitas y de los cleri– cales! Por dos puercos duros te han comprado mis secretos ! Mezclada con· mil mentiras rodará mi reputación por la prensa reaccionaria! Yo soy una antorcha de la revolución social y quieren apagarla! Toma el dinero de las sacristías; me da asco! Guár– dalo bien; te advierto que en mucho tiempo no te he de entregar otro; que te dure, que te dure ..... Lajumera tiró los duros que se metieron, rodan– do, debajo de la cama, y salió del cuarto con una cabeza más erguida que la de un héroe.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz