BCC00R49-5-16-1700000000000000410

A. CAMPIÓN 125 de su corpanchón al diván:-:-dónd~ andai:-~aquél? Yaes hora pasada de su v1s~tade 111sp~~s1on. La observación de Eloseg1 no desv10 !a conver– saciónque sostenían Saralegi y el general. -Además de ese periódico, que es nuevo, los bizkaitarraspublican otro en baskuenze: Eu.zkadi– berriya; el nuevo no sé qué ..... ~icen ellos_que _está escritoen baskuenze; no lo entiende nadie. Dicen ellos también que nosotros no sabemos hablar, que nuestro baskuenze es un mal castellano. - Hay que animarles á proseguir por ese camino -contestó Pomés,-de lo contrario, si le hablan al aldeano su lenguaje habitual, acabarán por inn– cionarlede separatismo..... -Separatismo! - interrumpió el organista,-no tanto,no tanto: fuerismo, bascongadismo á dosis re- · cargadas. -Separatismo, no lo dude usted, amigo mío– insistióel general.-Ustedes los baskos, sin querer– lo ni saberlo, están algo resabiados de ello; propen– den al particularismo. Fué una gran torpeza de mi amigo D. Antonio, la abolición de los fueros. Yo que soy español, fanáticamente espafiol, no habría perpetrado esa barrabasada. Deberían ustedes con– formarsecon lo sucedido; pero no se les cae de la boca la mención del antiguo estado de cosas, y esa atmósferageneral contr.ibuirá á que se arraiguen las ideas separatistas. Nosotros, los aragoneses, te– níamos fueros; los perdimos ..... á lo hecho, pecho! La madre, aunque consienta injusticias, es siempre la madre. Sobre todo y todos Espai'la;más que nun– ca, ahora que la infame Cuba está sublevada con– tra ella. Por lo demás, algo hay en ese periodicu– cho que me encanta: su odio á la política y á los políticos. En aquel momento atravesaba el salón rojo, por delante de la rotonda, un caballero, del brazo de un

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz