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-69 - :Ido decir , que nunca se ha tomado ninguna medida gene– :l ral de parte c1e"nadie . Por lo que ú mí tocn he aconseja– ~do con insistenc ia destinar al c r,gorde e l ganndo proce– ~ dente de una va ca tube rculos a , é inculcarles la necesidad :l cle me jorar las condic iones de los establ os .v el uso de las :l lechndas de cal como des infectante, pe ro en la intel igen– ncia de que no había de se r atend ido en la mayo ría de las ~ veces, por lo que ll evan cn el pecado la penitenc ia , pues ~ hay casas en las que mue ren dos ó tres tocios los años . :lAu nque no tengo sufi c ientes datos , apostclría iÍ que pasan ~de tres por ciento, si se fu e ra á reconoce r por medi o de ~ Ia tuberc ul ina , los casos de t ube rculosis en el ganado va– :,CtIllO el el Baztán. No se presta n los ganade ros al diagnós– nti co con la tu ber culina' :I De modo quc segtí n estos datos y sabiendo que próxi ma– mente son 4000 vacas , las que hay en Baztün , res ulta que existen ciento ve inte vacas t ube rculosas , ca nt idad muy respetabl e )' que me rece que las autoridades, la J unta de Sanidad , los ve te rinari os, los médicos y todos, tomemos con empeño reducir esa c ifra , mi entras no sepamos con seguridad si el ilust re Koch aci e rta al decir que la tube r– c ul osis bovi na no es t rasmisible al hombre . Otra medida profi láct ica y qui zás curativa se ría la cons– trucción de un sana torio- hospital para tísicos pobres en e l puerto de Ve in te y ésta s i que serín una obra magna de ca!·i dad y de higi ene . Ot ra endemia muy bi en aclimatada en el vall e de Baz– tún , es la fi ebre ti foi dea ó ti fus origi nado por e l bacilo cil; Ebe rth que vive en las agua s potables 6 que se t ienen por tales y que se difunde , por pueblos! ba rr ios y caseríos, (como sucedi ó e l año 1899) de una mane ra a larman te . De entonces acá no se ha presentado más que en casos aisla– dos, á todo lo más familiares, y el qui nquenio que nos sirve de base de estudio , no aba rca aquella epidemia de l b'?) ni otra semejante . Se not a su fáci l tendenc ia á difundirse por poco que le ayuden la pobreza de aguas, ó algtíll riachuelo de compro– miso) del cual se sir van para bebe r y limpiar los habitan– tes de un bar rio 6 pueblo , 6 sirva de vía que comun iq ue varios caseríos que de él se sil-van. E ,·t~ enfermedad es tan conocida que buelga su descri p– I.:i ú: :; ünicamente notaremos que se presenta con fac ilidad en forma espo rád ica¡ y que los años hümedos en verano y otoño se observan más casos ; que su g ravedad es g rande

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