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La cas illa que con e l epígrafe suicidio comprende seis casos y la casill a que con er de asjixia muestra otros se is elebe,mas estu,d iarl os juo'!OS po r cuanto. a.lg :úrr ca so de c:Ol~ gamlcnto, aSI como a lgun otro ele SUICIdio por sume r Sión es probable est én comprendidos en el grupo nsAxin; de es ta manera podemos notar el c recido nÚqlc ro de suicidios en comparacfÓn con la s media s provincinl y nacional y lo también llama remos la atención ace r ca el e l procedimiento cns i exclusivo de colgamiento ú que s ue le apelar e l sui ci- da del vall e. Po r lo muy relacionado t¡u c con esta Ill ort<lli- clnc! ~e halln , debemos mentar el número tambi én c rec ido ele locos que se observa, así como de los que padecen de atrofia méntali ·cxprcsión todo ell o de la ya notada dege– nerac ión psíquica , cu lt ivida y aumentada por la consan– guinidad de los matrimpn ios cuando son fecundos, pues la inrecundidad en estos matrim onio'~ es la regla . La hemorrag ia puerperal se nos muestra con tres caso~, que \Jor las c irc~nstancias .que concurren en las paridas, falta de aSist enCia con \'CllI cnt e J en lugares apartados de Ins pobl ac iones, par ir tuera de la cama , ma l-char Ú ella. por Sll pié, abandonar la cnma pronto y otras; no me pa– rece exces ivo el número, por esta mi sma causa el e falta de asistencin aparecen dos casos ele r otura uter ina pOl" pre– sentac ión transve rsa l y [alta de co rrecci ón oportuna_ , Hay un caso de pleures ía ga ng renosa, mue rto , (po r ha– berse rctardadoja.pleurotomia), de septi cemi a. U\l casCI' de síncope que no sé qué signifi cación puede tener, pues tan só lo sé que e ra una joven que murió ins– tantáneamen te en un viaje á una bo rda. situada á una bue– n:'t altura, sin que tuviera historia patológica. Hay un c.aso de deliri o traumá ti ,,:o; despué~ de un pe– quci"io esqulIlce co n rozadura de la piel ele la pierna que se enrojeció con apari encia c risipebtosa y muy lige l-e fi el1re: el enfermo era alcohólico y fué pres a de un deliri o violen– to , con a luci nac iones; se le inyectó un centígramo de lll o r~ fina , sin efecto¡ á la media hora; se le puso otra; a l poco rato el enfe rmo quedó sosegado y mue rto: c reo que inHu– yú la modi na en este desenlace , pudo hace rse la inyecci ón den tro de a lg ün Vfl.SO é inhibi r la fun ción de algún centro motor cn rdiaco ó resp iratorio . Del n'lpido bosq ue jo que hemos hecho de las enfermcda– des comuncs, deduc iremos la bIta de c roni cismos que sc– ñal en una carac terística: solament e la que :'tI princ ipio he– mos señalado , cs dec ir , la nrte r io-escle ro.<:. is con su h iper~