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- 63- El S de Diciembre volvemos á París· á descansar. Anteayer en Zurickan cuando nos creíamos solo entre Sajones, Pablo y Berta se disponían á tocar la Sonata á Ki·eutzer, se levantó un joven de Ru asiento en medio de la sala y d!jo en alta V07, "Una joticn Don Pablo" Nadie le comprendió, pero se tocó lajola <le San Fermf11 al 1epetir y vino á saludar en la puerta á Don Pablo y resultó ser un ioven de Pamplona, cuyo nombre no tengo. Suyo affmo OTTO. La fecha del 23 de Octubre se hizo memorable en Darmstad donde fué objeto de una sola continuada muestra de simpatia y de afecto que empezó á manifestarse con su arribo á Ja ciudad, y no le abandonó has1¡1 después de su in archa, acompafiándole en ci1.lles y plazas, en el hotel y en el telltro, de día y de noche, constit11ye11- do un verdadero delirio especialmente para los que hablan acudi– do al concierto que en Febrero ú\limo babia. sido interrumpido por alarmante enfermedad que dejó á aquel público tristemente impre– sionn.do y en esta ocasión tomó cumplidn. revancha, acudiendo al concierto de Octubre que representaba la resurrección del artista; no es para descr ito el regocijo inmenso de aquél público :il volver á escuchar de nueYO las excelencias del arte insuperiible de nues- tra querido paisano. · En Stuttgard, Munich y Dresde, capitales de los Reinos de Wurtemberg, Ba.vieru y Sajonia, respectivamente, y que figuran en pr ;mera. fi'a en el movimiento musical del mundo, les conciertos ce!ebrados por !os dos colosos alcanzaron un éxito enorme, y á ellos asistieron las Córtcs respectivas, colmando de honores los Re– yes á ambos artistas. L:t Infanta Dona Paz que habit1111.lmentc re– side en Munich, admiradora del Arte del violinista espafiol, expre– só su entusiasmo á la terminMión de cada. uno de 1-.s números del concierto, felicita.ndo al artista y á su ilustre acompafi11.0te. En Dresde el entusiasmo rayó en los limites del delirio: el snlecto pro– grama interpretado á mnravi\la, eleclrizó á Ja con ~unencia que prodigó á los ar1istas una de las demostraciones de carillo que no es posible describir, tomando ya, caracterPs de permanente el con– cierto <le referencia: porque parecía existir competencia entre el público pidiendo y Sarasate dando más y más música. · Acerca de esn. época, la prensa local se expresó en los términos siguiente~: LOS TRIUNFOS DE SAílASATE (Diario de Navarra= 19 Nobre. 1907) Madrid 18-15, 40 Se ban recibido telegramas de Berlín dando cuenta de otro grandioso éxito obtenido por el eminente violinista navarro D. Pablo Sarasate. Anoche dió D. Pablo. ante selecta concurrencia de artistas y aficionados, un Cúncierto en la sala de la Filarmónica de aquella capital. Los aplnusos y folicilacioues que recibió el excelso artista del violín fueron incomcnsurables, en número y e11lusiasmo. La prensa berlinesa es unánime al juzgar la labor de D. Pablo. Uu imporlanle periódico de aquella capfüü dice: El gran violinista goza todavía de la plena posesión de su insuperable vir– tuosismo.

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