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-581- comprobación, exigieron la presencin del Sr. A1·bizu en el bal– cón priccipal del Consistorio, desde donde dirigió la siguiente promesa: •¡Pamploneses! La Alcaldía de Pamplona agradece la profunda pena y nobleza de sentimientos con que recibís al gran Sarasate, y s.e felicita al mismo tiempo de la cordura que en este solemne mo– mento demostrais. Tened calma, pues tan pronto como sn.lgan las comisiones, des– filnréis todos por la capilla ardiente, donde creo inútil recomenda– ros, pues vuestra sensatez y hermosos sentimientos os.lo dictan ya, la mayor compostura ante ese (sefialando el féretro) hijo esclareci– do de Pii.mplona que vamos á Ye1· por úlrima vez.» Durante varias horas, hasta la media noche, el pueblo pamplonés desfiló ante los restos fríos del hijo idolatrado, rin– diendo culto al que fué orgullo de la patria. Ningún incidente, ni las más mínima incorrección hubo que lamentar: la inmen– sa mayoría de las Señoras vestían de luto, y las lágrimas q11e allí en gran abundancia se derramaron, testirnonio fueron del hondo duelo que el pueblo sufría; h\ fuerte y valerosa .Ciudad al contemplar el yerto cadáver <lel artista inmortal que tantas veces hizo palpitar nuestras almas con los delicados acent.os , los arl'Obadores cantos y sednctoras armonías del célico stra– divarius, al .ve1· rota en pedazos Ja divinizada lira que á los vientos lanzara infatigable las ideales estrofas de los himnos po– pulares, encarnación viviente de nnestt'os sentimiemtos más hondos, padeció la más crnel tortnrr., revelada en las tiernas y sentidas frases que expontáneamente bl'Otaban de todos los la– bios. El fúnebre dP.sfile hubo de interrumpirse hasta lit madru– gada siguiente: el aspecto de la población enlutada, d silencio con que circulaba por las calles el vecindario, el dolor que en los rosh'os se dibujaba, eran prneha concluyente de la impre– sión profnnda sufrida, del cariño que á Don Pablo seguía re– servándole su p11cblo amado, de la admiración qne su grande– za nos produjo. -Era un pedazo de Navarra- decían los unos al sitl ir de la capilla ardiente. -Ha muerto sin enemigos- afirmaban otros. - Su mundo no era éste-Hemos perdido una institución -Alma mater de Pamplona artística-Creador de perlas mu- sicales- Que la pátria. le recuerde-Bienaventurados los c¡ue dejan amor, ndroiración y respeto.-Sns delicias fueron Ja pá– tria y el arte-Fné nuestra bandera en todo el mundo -Dios le bendijo al nacer-Dulces más que la miel fueron sus notas