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--531- médico, al que cupo la tristísima suerte de prestar los último~ auxilios de la ciencia y certificar la defunción del inconmensu– rable art ista. E l 3 de Octubre de 1901 vendió Snrasate al mismo edi– tot· esta obra, en unn cantidad que no pudiendo citar exacta– mente, prefiero no estnmpar. La obra 48, salida de la casa editorial Zimmennann, fo é declicatla. ni Sr. Adolphe Ta\·ern;er, antiguo y predilecto ami– go del fascinndor artis1a, asíduo concut'l'ente á. las tertulias de Sarnsate en PMís. Crrnciones rnsas, obra -19; fué editada est.!¡, producción por 7-immermann, de L eipzig, y su íiltima ejecución por el autor corresponde al 1-1 de Mayo de 1908, en cuya fecha di6 el úl– timo c0ncierto fuera de su pátria, en el palacio del Trocadero, con el concm·so de la orquesta Oolonne. E"'tn obra. es la segunda que Sarasate dt:dicó á. su buen amigo, el Profesor del Conservatorio de llruxelas y eminente violinista .!\fr. Eugene Isaye. La. obra 51 Pa11tasla sobre D. .Juan, de Mozart, editada en la casa Astrnc, de Pads, es la segunda dedicada á Udme. Ber– ta Marx de Goldschmidt, cuyo elogio, cumplidamente hecho por todo el mnndo ar tístico, no ha menester el nuestro, hnmil– de é incompetente. La obra 52, editnda por Zimmermnnn, de L eipzig, está de– dicada al conocido maestro español su amigo Fernández A1·-. bós. La audición pemíltima de esta obra tuvo lugar en Zara.· gozn. el 23 de Mayo de 1908; anleriormente la había tocado Sarnsittc en el concierto, último de sn vida, que <lió en F ran– cia el 14 de Mayo en el l\ tlacio del T1·0cadero, con el concur– so de la orquesta Colonne; y tiene el triste privilegio de ser ll\ última composición propia, entre todas las suyas, qi1e sn llora– do autor ejecutó en público, y la primera \•ez que, con acom– pa1lamiento de orquesta se ~scuchaba en Pamplona. Ocu1Ti6 esto el día 12 de Julio de 1!>08, á la una del día, momentos anles de ser impue~tns al Hijo predilecto de Pamplona por el Sr. D. Daniel lrnjo 1 Alciilde Presidente, las insignias de la Gran Crnz de Alfonso XII, cuyo acto '1olemne queda des– cripto en el lugar corre¡¡pondiente de este libro. La J ota de Pab/0 1 ha siclo ent1·c todas cuantas compuso, la qne más ha seducido {i sus auditorios, y hi que ha merecido más unánime~ elogios en su país y fuera de su país, motiv<? por el cnal, s;: íntimo amigo D. Antero l l'llzoqni, le dijo á lue- go de oír:>eh por \·ez primera: ·