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- 367- épocn de su ,·ida artística, interrumpida en Darmstad, suceso que conmovió al mundo musical. Piirn bien y glMia del arte, pnr!l íntima satisfacción de Nava1·1·a, de E~pafiii. entera, Sarasate estaba en lx plenitud de sus portentosas facultnde~, y los progr111nas que envió, dignos ernn de su fama ttniversul, nuevos siempre, aun descontando el hecho de qne tnnto mayor es el deseo de volverle<\ escnchnr todo su l'cpe1·torio, cunntns más veces se le hn escuchado. He aquí esos pl'ogrRmns: l.º Romanw Sd,·ensen-Fautusla de D. J nan. 2. 0 La Caw.- Ca11cio11es rusas; nmb1H1 de su produccióu. 3.° llarn11aise tl e Saint-Saens y El Can/u cfol Ruise'ñol' , de Snrasate (tran$cripción). 4.º Mim111a1· (r.ort.-.ico del ejecuurnte); y Rapsodia asftt– l'Ía11a de Villa. Ademiís ejecutó ro colabol'Rción con Rcrta Marx, la Sonata <Í Jfre11fzer, de l3eethoven. L11 g ran pir.ni ~ta nombrada, á quien tantas veces hemos ya ndmirn<lo en nuest.ros conciel'tos y cada vez con mayor asombro, realzó una Yez más sn talento, ejecutando: 1.° Concierto en Sol menor de Saint-Saens. 2." l11vifarió11 al Vals, de Weber. 3.° Rapsodir1 sobre aires bohemios, de Sarnsate, adaptada á piano por la ejecutante. 4.° Africu, de Saint-Sacns, 5.º Fantasía l11ín(J11rn, <le Liszt. Todns estas obrns fueron acompm'indns pol' orquesta. L as SLas. Pilar Michelena y Josefa Sanz, contribuyeron también Rl brillo de las solenmidncles de referencia, luciendo en ellas sns estimables condiciones de ai·tistas de cornzón. ~fr. Otto Goldschmidt, el inseparable compniiero de Sara– snte, contribuyó así mi:;mo a l relieve de las audiciones. y parti– cipó, por sn itlcntificnción con Kavarrn, de lns emociones de todos, cuando los sngci-tivos aires populnres espaíioles satu– raron de enca11to la sala del T eatro Gftya1Te. Cdebrál'onse los cul'ltro conciertos acostumbrados; sus pro– graml\s selectos, c11idaclos como siempre con paternal esmero, hnbf:rn constituido 11na fundada e1<pernnzn de que asistiríamos ni resurgimiento del artista impondrrnblc; y en efecto, los he– chos co1Tobor:n·on plenamente las ilusiones concebidas. Lu. crítica de estos hermosísimos concie1tos, que tomo ele la mny esmer!lda revista "España y América,, me releva de todo