BCC00R42-6-180000000000000000

-328- y con h\ remisión necesaria., y par:;. que conste en el expedien– te de su razón, expido la presente, visada por el Sr. A le-a.Ideen Pnm– plonn. á veintisiete do Julio de mil ochocientos noventa y ocho.= Agapito Go!l.i, Secretario =V.º u: El Alcn.Ide=Miguel G. 'l'u– flón.=Hay •m sello que dice:=Ayunttimicnto Constituciono.l cto Pamplona.. - --·-:>·--- DEDICATORIA DEL ALBUM. - - - -')}---- •LA M. N., M. L. y M. H. CIUDAD DE PAMPLONA ,1, &U ILUSTRE HIJO EL EMINEN'J'E AR'l'ISTA EXCMO. SR. D. PAULO SARASATF. EN TES.l'IMONIO DE AFECTUOSA GRATITUD. - 0- - ACUEHDO DEL E.\'.CMO. AYUNTAMIENTO F.N SESIÓN DEL 15 DE JULIO DE 1897. • - -:0:-- UllO de los testigos presenciales del regocijo popular que producfo á sns paisanos la Yisita anual de Don Pablo á la ciu– dad nativa, se expresa en los términos siguientes, que por l\CCl'· cnrse bastante á la realidad transcribo en este lugar: cHa levantado la figurn de Sarasate, (no en el terreno artfstico precistuuente, que por ahl ha estado siempre muy alto), sino en ese otro ordeu de la simpatfa y del carillo, la manifestación constante de amor á su patria, que ha constituido en su vida un rito sagrado y por razón ninguna ha quebrantado ja.más. En medio de sus <ipo– teosis de gloria, entre los agasajos de los grnndcs, y todoese humo de a lubnnzas y de encomios que podfan aturdírle, Sarasa.te venia, por muy lejos que estuviem, todos los t'l.nos invnria.blemente i\ ce– lebrar las fiestas de San Fermin en su ciudad nati\l,_ y á esta pe1·e– g rinación de patriólico carifio, correspondfan sus paisanos, nmén de recibimientos esplóndidos y entusiastas, con una expansión ge– neral y desbordada de toda clase de sentimientos, de admiración, de entusiasmo; pero sobre todo de uu afecto grande y Jh\r.oto, de un cariño expontáneo, todo popular; Sa1·asnte e11 Pamplona era do casa, y todos los navitrros se tenían no solo por amigos suyos, sino que forzosamente crelnn que So.rnsate tenla que serlo do todos y de cada uno, y habla que ver como la.gente de b1·once, las cuadri llas de mozos que pasa.u los dlas de las fiestns bailando y bebiendo, des– filaban una á una, sin faltar ni la más modesta, con su chunchu– nero ni frente, por debajo del balcón de Sarasate, para festejarle con sus rústicas tocatas y bailes, vocenrle unos cuantos vivas, ha– cerle salir al balcón, tirar sus boinas i~I aire, repetir sus aclama– ciones, y marcharse luego tocando y bailando satisfechos y alegres de haber cumplido con un deber de urbanidad, conj una estrecha. obligación, y aún mt\s, do haber sido correspondidos y saludados y

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz