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-254- blico fué delirante; las Jlnmndas á escena innumerables, y lln!\ hora después de llegar á su alojamiento, se veía éste todavía invadido de admiradores y amigos, que hacfan coro á la mu– chedumbre, incansable en aclamarle desde la vfa pública. En Abril de 1887 vuelve á Barcelona el aclamado Sarasa– te, procedente de Valencia, y en unión del sexteto qne ·dirige el maestro Arche, celebra cu&tl'O conciertos que le valen ova– cione¡; indescriptibles. En la cindad condal, durante el mes de Septiembre ele 1890, <lió cinco conciertoH; el entusiasmo, que fué inenarrable desde la primera audición, iba en a umento cada día, de tal suerte que para el último, a.nuque la sala hubier1t siclo cuatro veces n1ayor se hubiese llenado por completo; mnqho público hubo de contentarse con ovacional'le en las Ramblas al diri– girse Sarnsate al Grnn 'l'ea.tro del Liceo; el entusiasmo de los co11c•1rrentes á aquella solemnidad, se desbordó en int~rmina­ b les aclamacioiles, interrnrupidas tan sólo cuando se disponía á tocar de nuevo una y otra. vez. Poi· fin, terminado el copcierto, aunque no las aclamaciones en la gran sala, se reanudaron es– tas en la vía públici1, y no linbiernn terminado si nó fuese por el entorpecimiento qne se ve11fa originando para la circnlación de coches, tranvías y pilblicc•. Una vez más en Mayo de 1 ~91 comparece en B;:1rcelona el sin par violinista, celebrando ocho conciertos, q ne, como todos los anteriores, promovieron entnsiasíno sin límites y hubierate– nido que aumentar aquel número á no ser tasados los momen– tos que le restaban para presentarse en Londt·es á cumplir los compromisos contraídos tres meses antes. Pocos años más tarde, en Mayo de 1895 vuelve r~ comp11- 1·cce1· ante el público de Ba1'celona el fascinador violinisttt, el concertista. seductor de todos sus públicos, y sn éxito supera. todavía á los ant~riores: fué una série ele tres audiciones en el Teatro !frico, los dí.is 10, 13 y 15; breve série e11 relación :~ las anteriores, y a{m míls breve pnrn. el público, que de elo– cnente manera demostró su fruición y deleite, como se ·deduce por fa lectnra de los siguientes comentarios del "Diario de fü1rcelona,,, escritos á lncgo de salir Don P ablo para L ondres, despidiéndose del sexteto Arche que le había acompafíado en una tournée de 48 días por Españtt: S.A..Eh..S..e...TE. __ ,,, __ •¿,Que puede decirse de Sarasa te que no lo hayan dicho todos los

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