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sin otro resultado, y otras veces provoca. p:,r contactos y .condiciones externas que induc en , las actividades naturales, como e-n una combinación química; mas la fecundidad y la aptitud radical. factores esenciales de eficacia, son de las cosas y no del tral:ajo que a ellas se aplica; por lo cual es– cribió el Apóstol San Pablo «ni el que pla nta es algo ni el que riega sino el que hace crecer a la planta »; depositada la semilla, mien tras el labrador descansa y duerme, la na– turaleza opera calladamente . Nos hallamos, pues, con que ni podemos determinar la eficacia del capital ni la del trabajo en sí mismos; y si no te nemos números no podemos comparar cantidades. Siendo muy diversa la eficacia relati va del capita l y del trabajo en tan diversas especies de empresas y explota – ciones . v concurriendo ambos como factores esenciales, lo único p;áctico y lo único objetivo para los efectos de una ordenación social, es equipararlos para las normas genera– les y que és tas se.m formuladas de modo que no trascien – den demas iado las diferencias que en casos y casos pueda haber . No compara la ley este trabajo con este capital sino el trabajo y el capital; según los atributos por sí, de uno y de otro . C) UNAS OBSERVACIONES PREVIAS AL ESTUDIO DE LAS RELACIONES DEL TRABAJO Y DEL CAPITAL EN LO QUE AFECTA A LA DISTRIBUCION DE BENEFICIOS Y UT!LIDADES .En las cuestiones acerca de la distribución de ut ilidades <::ntre el trab:1jo y e l capital. debemos distinguir dos aspectos, el ma terial y el formal, el 9e la .ejecución y el de la dirección; estas cues tione s pertenecen a la economía y a los econo– mis ta$ y financieros, y pertenecen a la justicia social y a los scció"og os, pero bajo distintos aspectos . El Sclidarismo ofrece su doctrina, sus principios, .sus crie ntacicnes para una ordenación social de justicia, respecto de la ¡:articipación _del trabajador en los beneficios y utili– dades; en la adaptación de esos criterios a la realidad de la 18-!

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