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x26 Convir.s ac ion.e$ •t':xpedenda ·11an3 . ., y se pueJe ver cch:mdo 1os ó~. 1Ios en .a_g(:1l ·: lue.go ·de 1a .mism.1suerte p,1..cde suceder ·el ,cngend.rar-se -de -los mue.reosfas serpientes ·: tengo!o por ,indL'l@lC3.Dlc . 'Oja l.a Sl.Casell.10S de Sernejantcs tl10ílS• uuosídades ·.algtrnamor.alidad mil ., vie~do en -lo que viene .a :par.arla hcnnosu.ra mas prcsl:lmtda ., y 1a mas ticsvanecida .a1tilfez. A ·este fin trae el P. Ferrad eíl ~u "Biblioteca., y.r. Mundus, lo siguieme, sacado del doéiis1u1 0 Fra:nc.iscoViv. in Sill1a. Und e 'Superb i Q uid SUlUUS nisi li De iimo ho1no·pri Sorrem vitare nequi .Si nos terra su Terra ,quid est nisi fu Ergo nihil su Ideo studea Uc parati si ·1 . -· · mus. la cansa de que se ~ngendren dentro <del cuerpo hunu• no taks animales ., y -sabandijas., puede provenir lo uno , de que escas se entran c:n el cuerpo por la b:>o ca, o por otra parte del cuerpo; -esto·es tan sabido, como que Hipocrates en el .5 .Epidem. h:ice mencío11 de un mancebo, que estando durmiendo en el -cam• po, se le entro por la boca una culebra. Galeno re• ficre otro , á q~icn se le entro una vivora: libru J• parte r. Otra causade hallarse en el hombre sabandijas, es , el hav"