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-57- que habremos de estudiarla pa l'a respon– der con conocimiento de causa ú la pee– crunta l)_Ue sirvo de cabeza á este trab:1jo . :::, Etimo lógicamente, nación Yiene de 11as- oor y signifi ca: seg ún el esclarecido lilósofo italiano P. Taparelli, , gene1·aci011 de hom– bres de origen común . que hablan la mis– ma lengua, con inst itucionrs propias y propio territorio». De estas cuat ro notas, dos son factores esencia les ; ¡rne:3, como dice el insigne filósofo, «lo que propia– mente constituye tal ó cual na ción es la identidad ele origvn y de le1101m en una Sociedad . Las otras dos . son propiedades; propiedades esen c~nles en la susta ncia, pues no ex iste nación alguna s in forma de gobierno ó 'Ínstituciones y sin territorio: pero accidentales en sus modifi cac iones, pnes que un pueblo ¡medo cambiada s s in perder por eso sn n~cionalidad ». Quiere decirse con esto, (lUe al lá donde exista una sangre y u na lengna, apar ecel'Ú necesa riam ente, una na ción, sobr e un to– rrito t'io, brotando como frntos de su acti– vidad, instituciones á cuyo amparo se go – bierna. La unidad de sangre constituye la rc1,zc1,.